Gianluca, su sonrisa y la maratón
El vitoriano de 12 años completará la prueba de 10 kilómetros de la Marartón Martín Fiz en el marco de una iniciativa que pretende recaudar fondos para adquirir su nuevo andador
Vuelve la maratón Martín Fiz, y en la carrera una accion solidaria, Kilómetros por Gianluca
28:40
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1651577236150/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Vitoria
Gianluca vive el momento y este domingo 8 de mayo se viene para él un momentazo. Tomará parte de la prueba 10K de la Maratón Martín Fiz. Va a completar la distancia en una silla especial que le ha prestado otro chaval con parálisis cerebral, como él.
Un grupo de voluntarias de la escuela de triatlón de Ruth Brito harán avanzar esa silla. Raquel Villarreal, una de esas mujeres, explica que en realidad ellas no tiran: "El domingo va a ser brutal. La va a gozar, la va a disfrutar. No le vamos a llevar. Nos va a llevar él a nosotras. Lo tengo clarísimo. Vamos a volar con él".
Lo dice después de haber comprobado cómo se lo pasa Gianluca en los entrenamientos, en los que no ha dejado de sonreír. Porque él se rige por sensaciones y los brincos, la velocidad o el jaleo en torno a su silla de corredor son estímulos positivos que le hacen feliz. Realizar esta prueba deportiva forma parte de una gran aventura en la que se han embarcado su familia y una gran red de amistades y colaboradores para conseguir fondos que permitan adquirir su nuevo andador; una ayuda técnica clave para su día a día.
La idea de liarse la manta con esto de la Maratón surgió de un vecino, Txema Sánchez. En sus encuentros con Patricia Suárez, la madre de Gianluca, solía salir a relucir la necesidad que tenía el niño de cambiar su andador por uno nuevo, que fuera de su talla. Un dispositivo que significa salud e independencia para Gianluca. La posibilidad de hacer cosas que no puede realizar desde una silla, la posibilidad de incorporarse o de pasear a su perrita a gusto por la calle; la oportunidad de ver la vida de otra manera. El caso es que ese aparato es caro. Carísimo. "Un artículo de lujo", señala Patricia, que su hijo requiere en lo cotidiano.
Así las cosas, la maquinaria se puso a funcionar: silla para correr, voluntariado para desarrollar la prueba, camisetas para recaudar fondos, huchas solidarias en establecimientos, publicaciones en redes sociales, etc. Ya están en el camino de conseguir el dinero para financiar ese andador. El que le queda pequeño a Gianluca, irá a manos de otro peque en donación. "Queríamos que la gente viera que los padres somos trabajadores normales, con sueldos normales, que esto es inviable. Yo con un sueldo normal no puedo acceder a una ayuda técnica así. A una no, a todas las que necesitan", dice Patricia.
Gianluca participará en la Martín Fiz para visibilizar todo eso. Su equipo va a volcarse con él y anima a otros corredores y corredoras de la prueba a unirse a su pelotón. Txema advierte de que Gianluca necesita que le griten, que le llamen por su nombre, porque eso le pone contento. Irán al final del grupo del 10K, intentando no dificultar al resto de participantes. Se les verá de lejos. Con sus camisetas verdes en las que aparece Gianluca. Sonriendo.