Un convenio sobre ruedas

Aranda de Duero

La Asociación de Familiares y Enfermos de Alzheimer de Aranda y la Ribera renovaba esta mañana con Michelin el convenio de colaboración que mantiene con esta empresa, que colabora con la labor social que realiza aportando los neumáticos de los vehículos que sirven para trasladar a los usuarios. Los desplazamientos, tanto al Centro de Día que tiene en la calle Las Francesas, donde se realizan las distintas terapias, como al Centro Intergeneracional de Belén, donde desarrolla su taller de memoria, se llevan a cabo tanto en el ámbito de Aranda, como de la comarca, desde donde acuden algunos usuarios. Por eso, la presidenta de AFAR hacía hincapié en la necesidad de que estos vehículos ofrezcan la máxima confianza. “La seguridad de nuestros usuarios es esencial, cuando nos estamos dando cuenta de que hay mucha necesidad de transporte por el campo, porque no nos desplazamos solamente por el centro de Aranda, sino extrarradio e incluso algún tipo de ayuda rural a recoger a usuarios de zonas distintas”, explica María Antonia Sassot.

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Además de aportar los neumáticos, la multinacional colaborará con AFAR en la renovación de uno de sus vehículos que más lo necesita. Esta iniciativa se enmarca en su política de implicarse en el tejido social de las ciudades en las que está presente. La Directora de Comunicación y Marcas de Michelín España y Portugal, en el marco de la firma de este convenio, hacía un llamamiento a que otras entidades o personas se interesen por la labor que realiza esta entidad y colaboren con ella en la medida de sus posibilidades. “A veces son ayudas pequeñitas, a veces es material o mobiliario, pero es verdad que la gente puede ayudar de muchas maneras, y eso es muy bueno saberlo, acercarse, conocer, porque con pequeñas ayuda se puede echar una mano importante a este tipo de asociaciones”, sugiere Mónica Rius.

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De momento, este viernes se celebra la cena benéfica que sirve para recaudar fondos, que en 2020 estaba programada para celebrar las bodas de plata de este colectivo. Todavía hay tiempo de apuntarse, aunque también se aceptan colaboraciones de fila cero.

La presidenta de AFAR comentaba que su aspiración es extender sus redes en la zona rural, donde las familias son más reacias a dejarse ayudar. “En el ámbito rural la mentalización es un poco más complicada, porque los familiares quieren cuidar a sus enfermos y es devastador, entonces tenemos intención de abrir campos de trabajo en la zona rural, si el bicho nos lo permite y el factor económico también”, concluye Sassot.

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