Se reaviva la llama del playoff (3-0)
El Algeciras golea al Sevilla Atlético y sigue soñando

Un momento del partido / RA

Tarde de calor y goles la disfrutada por la parroquia rojiblanca en el Estadio Mirador con una importante goleada del Algeciras por 3-0 al Sevilla Atlético para acabar con su mala racha.
Pese a un mayor dominio de la pelota y contar con un jugador más casi la totalidad de la segunda parte, los visitantes no supieron desenmarañar la defensa local para recortar sobre los tres goles endosados por un equipo el de Ania muy directo y efectivo.
Presentó el ovetense un once con la ausencia de Roni y con Mena de mediapunta, por delante de Iván y Borja. La presencia en el equipo inicial de jugadores de la casa (Almenara, Tomás, Leiva y el capi) está siendo esta temporada sinónimo de buenas sensaciones y recompensa en forma de puntos. El inicio fue fulgurante. Un penalty dudoso señalado sobre Romero, en una típica jugada de las suyas de adelantar el pie buscando el impacto del rival, permitió al delantero marcar de Panenka el primer gol.
Tras el tanto y ciertos reajustes en el filial a la hora de presionar alto la maltrecha salida de pelota desde atrás del obcecado míster rojiblanco, el esférico fue propiedad sevillista. Lulo Dasilva dio una auténtica lección en el puesto de pivote a base de clase e intensidad, con muy buen criterio y haciéndose dueño de la medular, distribuyendo el juego hacia los compañeros que lo cierto es que no estuvieron a su altura.
Los del filial no eran capaces de conectar con sus delanteros, bien cubiertos y cerrados, y prácticamente un tiro lejano de Juan María fue la única ocasión. Para más inri, el Algeciras seguía a la suya. Una pelota regalada en transición fue aprovechada por Leiva que, a pesar de sus 17 años, demostró una clase y una sangre fría de otra categoría. En carrera, disparó al segundo palo, marcando un golazo. Los sevillistas no sabían por dónde les venían los palos.
Al descanso se marcharon ambos equipos con el 2 a 0 en el marcador y con las amarillas de Leiva y Van Rijn. El central no fue sustituido a pesar de estar en una posición crítica (el técnico del Sevilla Atlético sustituyó a sus dos defensas con amarilla). Tampoco el jugador parece que tuviera la cabeza fría. La realidad fue que a los pocos minutos de la reanudación el Algeciras se quedaba con uno menos por expulsión del central, que había llegado tarde y mal por segunda vez, con consecuencias nefastas.
Figueras entró por un insulso Renato, tratando de dirigir la defensa en un ejercicio de épica. El saque de la falta, directo, fue repelido por Pol, muy bien de nuevo hoy. El resto fue remar y remar, dando entrada Ania a los menos habituales como Víctor López (¡de delantero!), Villapalos, Peris y Serrano. Se defendía el cuadro de la Menacha con los que no son titulares y lo cierto es que demostraron una profesionalidad y entrega tremendas al luchar cada balón y llevar a cabo una actuación muy notable.
Hay que destacar a Peris, tantas veces criticado y que hoy, justo cuando más falta hacía, cuajó un encuentro de arrojo, técnica y visión de juego, dando justo lo que necesitaba el equipo. También Víctor, al que se le conoce el pundonor de sobra, y que de hecho sirvió en la recta final del partido un balón alto en una contra para que el canterano, Juan Serrano, remachara con el tercer tanto rojiblanco. La grada estallaba, un guión a pedir de boca.
Finalmente, sin mucho daño por parte de los visitantes que llegaron a tirar de Carlos Álvarez y Luismi Cruz, la portería de Pol se mantuvo a cero gracias a un gran trabajo de corte y sacrificio, cerrando huecos y no dejando espacios para que los rivales encontraran la manera de recortar distancias. Este punto de motivación, de lucha y de efectividad es el que se necesita a estas alturas, justo cuando el brillo desaparece y lo que se necesitan son los puntos. Sin lugar a dudas, el Algeciras vuelve a la pelea por los playoff aunque la verdad es que nunca se fue.




