Sobre trenes, libros y cine, con Fernando González Viñas

Córdoba

Fernando González Viñas ha vivido la experiencia de ser guía de dos grupos de turistas alemanes en el tren Al-Andalus. "Tiene vagones de los años setenta, confortables y acomodados, donde se duerme con habitación y ducha. Yo, como soy estrechito, estudio para estoque, como decía mi madre, quepo perfectamente. pero tuve dos alemanes que se duchaban medio cuerpo y luego el otro. Pero no es culpa del tren, sino de sus barrigas que ya las traían".

González Viñas, acompañado de Juanjo Fernández Palomo, ha explicado cómo el interior del tren cuenta con dos vagones-salón de los años veinte que Alfonso XIII mandó traer con estilo inglés. Un viaje único dentro de las rutas de trenes que plantean viajes turísticos a ritmo lento, con todas las comodidades y tiempo para visitar lugares y ver paisajes.

Además, ha avanzado que en junio se publicará su nueva novela gráfica, 'Los artistas del hambre' (El Paseo). En esta ocasión, además del guion se ha encargado del dibujo. Se inspira en los espectáculos del siglo XX en los que artistas se encerraban en una celda de cristal durante 30 ó 40 días para que el público los viera ayunar y pasar hambre, en algunos casos en restaurantes.

Por otra parte, coordina en el cine Fuenseca un ciclo de cine y música, 'Taurofilm'. Del 3 al 19 de junio se proyectarán las películas Los Golfos (Carlos Saura, 1960), La Vaquilla (José Luis Berlanga, 1985), Sangre y Arena (Fred Niblo, 1922), y Aprendiendo a Morir (Pedro Lazaga, 1963). Un ciclo que le ha encargado el Ayuntamiento de Córdoba cuyas proyecciones estarán acompañadas de sesiones de djs o bandas como Pelo Mono.

La versión de Sangre y Arena que se va a proyectar es "un peliculón", una cinta muda protagonizada por Rodolfo Valentino.

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