Hallan numerosos peces muertos por una red abandonada frente a la bahía de Málaga

Málaga

Un ejemplo más del desastre medioambiental al que sometemos a nuestro mares. Un grupo de buceadores voluntarios de la Asociación Universitaria de Actividades Subacuáticas (AUAS) de la Universidad de Málaga ha logrado retirar unos 50 metros de trasmallo -un arte de enmalle fijo al fondo de forma rectangular- localizado en los fondos marinos de la bahía de la ciudad -en concreto junto a la zona de los Baños del Carmen- con numerosos peses muertos que se habían enganchado a la red situada a unos dos metros de profundidad.

Las imágenes captadas por los miembros de la asociación (tal como se puede ver en el vídeo) demuestran que la red -de una extensión de unos 150 metros en total según las primeras estimaciones- estaba abandonada y "supone un grave peligro para la fauna marina y para buceadores que no se percaten de esa red y que puede verse enganchados", según explica en la SER Fernando García Herreros.

El grupo de voluntarios suele salir con frecuencia para bucear en los fondos marinos "hace tiempo que no nos encontrábamos una red de este tipo pero ahora necesitamos ayuda para poder retirar lo que aún queda en ese fondo" añade García que considera prioritario que alguna "administración: una concejalía, la Junta de Andalucía o la Diputación de Málaga pueda ceder una embarcación con la que se puede, de forma urgente, retirar el resto del trasmallo que aún sigue ahí abajo y que seguirá atrapando peces de todo tipo".

"Es una llamada de auxilio pero también de atención: hay que concienciar más sobre la contaminado que tenemos en los mares. Debemos luchar más para el control de lo que estamos haciendo con el medio ambiente y los desperdicios que lanzamos, por ejemplo, al mar" matiza este voluntario.

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AUAS es una entidad sin ánimo de lucro cuyo fin principal es ejercitar y favorecer la práctica del buceo cuidando y preservando los fondos marinos, las costas, las playas y los yacimientos arqueológicos subacuáticos. La asociación nace en el seno de la Universidad de Málaga en junio de 2006 con el impulso de un grupo de buceadores, con un espíritu proteccionista y altruista, siendo así un servicio a la comunidad. Esta asociación tiene una orientación recreativa, cultural, ecologista y sostenible.