Crónica de la Gran Final del COAC 2022: "Menos tanquetas y más carnaval"

La antología de Paco Rosado nos hizo volver a ver a «Los cubatas» y a «Los Cruzados Mágicos» en las tablas. Fueron los primeros estribillos en ser cantados en el Gran Teatro Falla en su noche más bonita. Eso sí, el comienzo de la sesión se retrasó 80 minutos. El coro «Los babeta» subían por primera vez el telón de la última noche de Concurso. Un gusto escuchar a esta agrupación y saber que la modalidad sigue teniendo grandes defensores como Pedrosa y Fernández. El primer tango, a la brecha digital. El segundo más original, aunque seguro que la Final trae más dedicatorias a la clase política, a la campaña de las elecciones andaluzas que justo empieza este viernes. Muy bien llevada al tipo esta letra. La tanda de cuplés mejor que en anteriores pases, teniendo en cuenta la modalidad nunca han tenido malos golpes. Ambos al tipo, no se salen de la idea en todo el repertorio y eso gusta, eso es Carnaval de Cádiz. El Sheriff volvía después de seis años a pisar una Gran Final. Roberto Fabio se estrenaba en una como autor. Con «Los caraduras de Cai» la fiesta estaba servida y desde el minuto uno de su actuación invadieron a público, espectadores, oyentes y crítica de esa felicidad y ganas de disfrutar de la noche. Cambios en la presentación, muy divertidos con un cameo del Meni. Primer pasodoble a la lucha obrera gaditana, mientras en Barcelona y en Madrid no se levanta un brazo aquí nos trata de delincuentes y «yo por mi familia le meto fuego». El remate levantó como un resorte al respetable que ovacionó la letra al grito de «esto es Cádi aquí hay que mamar» y «menos tanquetas y más Carnaval». Segunda letra, maravillosa. A sus compañeros de modalidad que «ellos sí que merecen un monumento que llegue hasta el cielo». Desde Villegas, hasta el Yuyu. Recorriendo las agrupaciones propias como «Caimán» y «Los Aleluya». ¡Qué bonita es la Final y qué regalos nos trae! La tanda de cuplés divertida, al estilo del grupo. El primero a los blanqueos de dinero que está descubriendo Hacienda y rematando con los blanqueos anales de un primo suyo «que le cobra Hacienda un dineral cada vez que se tira un peo». La segunda, mejor, al calor que está haciendo este año en el Gran Teatro Falla. Parece una playa y rematando con la polémica foto de India Martínez, con la voz de Eduardo Bablé como la megafonía de la playa. Y el turno del popurrí, uno de los más divertidos del Concurso y con el que todos acabamos cantando con la diosa Gades. El Edén volvía al Gran Teatro Falla en su mejor noche. El cuarteto de Iván, «Al Edén que le den» repetía la parodia de la fase de preliminares. La interpretación de los recién estrenados cuarteteros volvía a brillar sobre la escena. Iván volvía a tirar de las tablas y el ingenio del que ama esta fiesta como él. Primer cuplé también cantado ya en el Concurso y el segundo simpático a la factura de la luz. El tema libre era el de semifinales, excepto algunos pequeños golpes que, con el público predispuesto a todo, la actuación resultó muy amena y fue una alegría verlos en escena. Antes del descanso llegaba la comparsa de Antonio Martínez Ares, «Los sumisos». Una de las presentaciones más bonitas de ver y escuchar de este COAC 2022 se interpretaba de manera impecable sobre la escena. Primer pasodoble a Juan Carlos jugando con los nombres de las agrupaciones que el Capitán nos dejó para la historia del Carnaval de Cádiz, pero rematando llamando ladrón al rey Juan Carlos. El público se rinde ante la primera letra de Ares. El segundo mantiene ese recorrido por el Carnaval mientras camina por Cádiz, y mañana volverá a pasear la ciudad de sus entrañas «con más coplillas». Dos grandes letras con el sello de un grande, el niño de Santa María. Los cuplés. El primero a los políticos investigados por actitudes corruptas pero que al final siempre salen libres de cargos, «traerme a alguien que haga algo». El segundo, divertido, a su propio repertorio. Todos están enfadados: Moncada, la Reina y en astilleros no entendían sus letras, pero lo que le escama es que ha estado en la playa y Kichi no le ha dirigido la palabra «algo le pasa». El público no deja ni escuchar el estribillo. Grandísimo pase. Tras el descanso llegaba el coro de Luis Rivero: «Químbara». Tuvo que enfrentarse a una imagen lamentable del patio de butacas para una Gran Final ansiada por tantos aficionados. Ambiente, aparte, de nuevo una grandísima y animada puesta en escena. Primer tango a la Cádiz turística que está echando a los gaditanos de la ciudad. Bonita letra a pesar de ser, sin duda, el tema más cantado este COAC. Necesario, eso sí. El segundo a la mujer, a la desigualdad y al miedo que llega a sentir al lado de algunos hombres. Los cuplés, con ese acento cubano tan al tipo. El primero a las predicciones de Fernando Simón «en mayo en el Carnaval va a hacer fresquito y si hace calor será un caso aislado». Segundo a los congresos de los partidos y los sitios que eligen para celebrarlos, el que más fácil lo tiene es Ciudadanos «que cabe en un taxi». Y bendito popurrí que estamos deseando cantar bajo la batea. Los de Manolito Santander seguían al coro de Rivero. El primer pasodoble a los que por la época del año han tenido otras prioridades, los de fuera que han preferido feria a carnavales, «son tus hijos los que de verdad te quieren» porque ellos «sin cantar a la tierra mía yo es que me muero». Segundo pasodoble a las cinco almas que han sido lo mejor de estos dos años de pandemia y del adiós de Manolo. Carlota, Lola, Victoria, Manuela y Martín. A ellos, va la letra más emotiva de lo que llevábamos de noche. Qué bonito, el corazón encogido del Gran Teatro con sus lágrimas. El primer cuplé al cura de los responsos del tanatorio. Simpático, aunque el mejor golpe en la previa: «Cádiz quiso darle vida a la Zona Franca y puso tres tanatorios». El segundo a las modas gastronómicas de ahora, «leche de almendras, cómo se ordeña una almendra». La letra del cuplé sobre las frases de los sobre de azúcar, al quedar con una piba el camarero le advirtió de que la chica tenía miembro viril. La despedida del Falla a la agrupación fue increíble. El himno oficioso del Cádiz al completo. Lágrimas en los ojos. Vellos de punta. Esto es el Carnaval de Cádiz. El único primero que teníamos claro desde preliminares porque si el Gago ha traído un cuartetazo se dice. La parodia, inédita, va sobre un juicio al sevillano de los judiós, que a pesar de aprobarlo acaba lapidado con piedra ostionera. Buenos golpes. El primero de los cuplés, muy gracioso, sobre la «guantá» de Will Smith pero con varios golpes (nunca mejor dicho) bastante graciosos. El segundo cuplé al carnaval en mayo con un remate muy original, al no venir agrupaciones de fuera al final les parece mejor en mayo. El tercero, a la reina de Inglaterra y lo bien que vive, si la invitan. El cuarto al ascenso del PP y de Vox que, por ellos, que suban tanto «como Carrero Blanco». El popurrí, con las mejores cuartetas de los pasos anteriores. Pueden pensar que no tuvo grandes competidores, pero los que han sido muy grandes este año son ellos. Gracias por darle larga vida al cuarteto. La comparsa que este COAC 2022 ha hecho historia, y esperemos que sea la primera de muchas, llegaba a las dos y media de la madrugada a las tablas. «We can do.. Carnaval» ya es una victoria para siempre de todas, otra barrera derrotada, pero eso no quita que vinieran a por todas. Con emoción, con ganas, cantaban cuatro letras al tipo. El primer pasodoble. El segundo dedicado a la comparsa «La predicadora» que mereció el pase a semifinales y que no se considere que las agrupaciones femeninas pelean entre ellas. No es una lucha entre nosotras, sino con nosotras. Tanda de cuplés «contra el patriarcado». El primero a las bajas laborales por la menstruación que, de momento, ya ha sido efectiva para identificar «a tontos y fachas». El segundo a los que van de comunistas y luego no cumplen con las prioridades de esa ideología. «¡Qué felicidad, qué facilidad, vivan las mujeres independizás!». Segundo descanso de la noche y, tras él, el tercer coro de la noche «Pachamama». Primer tango, interpretado con muchísimas ganas, habla de símbolos y banderas y lo que para ellos supone la arco iris. Bonito tango que llega aún más gracias a la pasión que le ponen los intérpretes. El segundo tango a las condiciones laborales actuales. No falta gente para trabajar, falta gente que cumpla los derechos laborales y un sueldo acorde con los gastos. Han cumplido los 30 y viven en casa de sus padres, que no les vendan el cuento de que el esfuerzo se recompensa. «Que nadie me vuelva a mentir, porque se han reído de mi y me han engañado». Buena letra, buen remate. Buena tanda de cuplés de este coro. El segundo a las relaciones de pareja que acaba haciendo referencia al final del cuplé anterior, sí al que tenía un miembro hasta la rodilla. Los estudiantes han concursado con todas sus cartas en el COAC 2022 y verlos así es un gusto. Llegaba el turno de la chirigota de «El Lacio». «Huele a Verdín» volvía a presentarse sobre las tablas «al más puro estilo chirigotero». Primer pasadoble a cantar por primera vez en la Final. Letra de agradecimiento y dedicatoria a las personas que le ayudaron a llegar a la final. El segundo a su Conil de la Frontera. Dos letras de compromiso con los suyos y con su tierra, fidelidad que es bonita sacarla a la luz cuando llegan los grandes logros. Los cuplés, bien. Quizá sea la agrupación más floja de la Final. Pase merecido y defendido. El Jurado dirá, pero hay que reconocer que entre las favoritas no estaba, ni esta. Llegaba el primer momento del «Chapa» en la Gran Final, «Los renacidos». Quizá el grupo mejor dirigido de este certamen y que mejor vocaliza y se entiende, aunque opiniones tantas como colores. Primer pasodoble al Congreso de la lengua y la defensa del gaditano, muy bonita letra e inédita en este COAC. El segundo, también muy original, a la Cádiz que no aplaude los cambios de nombres y el honor a la Memoria Histórica y la anulación de los homenajes a los vinculados al franquismo. Si en semifinales las letras, a pesar de la pluma y lo bien ejecutadas, no eran originales, esta vez han tocado temas que no habíamos escuchado y eso se agradece, eso es la Final. Primer cuplé a los «expertos» que salen en televisión y saben de todo. Segundo a los cambios que provoca en la cara la mascarilla, dicen por ahí que todos somos más guapos con ellas. El popurrí una delicia y una suerte volver a verlo y escucharlo en el Gran Teatro Falla, por última vez. Comenzaba el último bloque de la noche más larga, pero larga, del Gran Teatro Falla. El coro «Tierra y Libertad» estaba en escena para reivindicar derechos a base de coplas. Primer tango sobre la patria que no es otra que la madre que los parió, solo por ella darían la vida gustosamente. En el segundo tango habla de un virus que afecta a todos y que al final se descubre que no es el Covid sino el fascismo. Buen juego de ideas. A la altura de lo que se esperada de él y del grupo, a la altura de una Gran Final. Cuplé a la cantidad de expertos que saben absolutamente de todo, curiosamente mismo tema que su comparsa «Los Renacidos». Diría que mejor remate este en el que sabe de todo, pero no que es el último en enterarse de que su mujer esta con otro. Segundo cuplé a los líos que a veces nos hacen los GPS, simpático. El popurrí gusta y la última cuarteta encanta. Había ganas de ver qué traía el Cascana y no defraudó. Adaptó el repertorio a la «Viñuela del mono». El coñeta virus ahora era el rey simio del Libro de la Selva, el Willy con su tanqueta ahora cazaba monos y todos los componentes tenían ya orejas y rabo. Así se presentaba en escena «Los cuarentena principales». El primero, a ellos. No han cantado en esa escalerilla al amanecer, ni les han cantado campeones en el Falla, ni han cantado con el Selu ni ido de festivales, pero su manera de hacer carnaval tan pura tiene nombre propio, Juanlu Cascana, y te gusta más o menos lo que saquen, esa esencia es única como su manera de disfrutar. Segundo pasodoble a los héroes de la pandemia, los sanitarios. «Por esos hombres y esas mujeres que en la pandemia dieron todo para salvarnos este aplauso va para ustedes». Bonito homenaje. Primer cuplé parodia al final de la actuación de «Los sumisos» con el cartel de «antes», para acabar diciéndole que no se meta con Kichi que con esas orejas «es primo mío». Segundo cuplé de actualidad, a la foto de India Martínez con sus hermanas y las tajadas de sandía. Para quien tuviera dudas, han venido a por todas. El popurrí, sin cambios destacables pero con la misma simpatía y disfrute que en pases anteriores. Joaquinito Alegría cerrando con su saludo a India Martínez y una coplilla flamenca. ¡Qué complicado lo han puesto en la modalidad! La última agrupación de la noche llegada de la mano de Piru y Tomate. Eran los últimos, pero era su primera Gran Final en adultos. «Después de Cádiz, ni hablar» pisaba sus amadas tablas para demostrar que estaban más que merecidamente peleando por los mejores puestos y que tenían repertorio para apuntar hacia lo más alto de la modalidad. Y así fue. Primer pasodoble al barrio de Santa María, recordando los años 80 en los que las drogas hicieron mucho daño entre sus vecinos. Han querido recordarlo para que eso no vuelva, para que no se repita la historia. Segunda letra a la figura del comparsista, a los ejemplos que han tenido desde que empezasen en esto del Carnaval, incluyendo incluso a Antonio Cantos «Caracol» y hasta que el dios Momo se los lleve cantando. Terminan muy emocionados este pasodoble. Los cuplés, de comparsa, pero bien. Será su primera final pero como continúen con la escalada que están demostrando desde que pasasen a la categoría de adultos no va a ser, ni mucho menos, la última. Y dieron las 8 de la mañana y la ciudad de Cádiz se quedaba a un veredicto de dar el pistoletazo de salida al carnaval en la calle. ¡A disfrutar, viva el Carnaval!