Ayuntamiento y Diputación aúnan esfuerzos para la protección del chorlitejo patinegro

El Ayuntamiento de La Línea está decidido a seguir facilitando la  protección del chorlitejo patinegro, un ave de pequeño tamaño incluida en el Catálogo de Especies Amenazadas de Andalucía, que anida en la zona de Sobrevela, el Burgo y Arroyo Negro.  En la mañana de hoy, se ha presentado la cartelería que la delegación  de Medio Ambiente colocará en las zonas de anidamiento y se ha realizado un control de ejemplares.

Desde el año pasado se han desarrollado varias acciones a favor de la especie por iniciativa municipal junto a entidades conservacionistas, y ahora también formando parte de la campaña financiada por el área de Transición Ecológica y Desarrollo Urbano Sostenible de la Diputación Provincial de Cádiz, con la colaboración del Campus de Excelencia Internacional del Mar (CEI·MAR) y el Grupo de Conservación de Humedales Costeros de la Universidad de Cádiz. Por ello, hoy han visitado el enclave, el diputado, Javier Vidal; la edil de Medio Ambiente, Raquel Ñeco; el responsable de la campaña, Alejandro Pérez Hurtado;  miembros del Grupo Naturalista Arroyo Negro, del Grupo Ornitológico del Estrecho (GOES), y técnicos de la delegación de Playas.

Pérez Hurtado ha detectado un único nido, aunque señaló que la zona tiene mucho potencial para atraer a más ejemplares, hecho que puede facilitarse mediante la instalación de mallas que impidan el tránsito. Desde que empezó la campaña en la provincia se ha observado una evolución positiva, ya que es una especie que regresa en años sucesivos a los lugares en los que se siente protegida, incrementando su número poco a poco. Remarcó, asimismo, la importancia de la suma de esfuerzos entre administraciones, entidades y sociedad para que la campaña tenga éxito.

Raquel Ñeco se mostró convencida de aportar elementos desde su delegación que contribuyan a impedir la destrucción de nidos en la arena. Por ello, se ha elaborado una cartelería que advierte de esta circunstancia. La edil expresó su agradecimiento al autor, Mariano Colorado, y a los voluntarios  que realizan el trabajo de campo.