La canícula de los fichajes

Estimados lectores:

Después de un tiempo alejado de la tribuna de la Ser vuelvo aprovechando el adelanto de la canícula veraniega a mediados del mes de junio, un signo más que evidente de que el cambio climático es ya una realidad.

Hablando de cambios, hoy quiero hablarles de los cambios que se han producido en nuestro fútbol comarcal, donde después de muchos años volveremos a vivir un derbi entre dos ciudades a las que unió un tercer equipo que se quedó en el camino de lo que hubiera sido un trío comarcal en toda regla.

En la capital de la Manzanilla empiezan a dar sus primeros pasos empresariales dos futbolistas profesionales que, viendo cada vez más cerca su jubilación, han decidido apostar su tiempo, su esfuerzo y su patrimonio en convertir al Atlético Sanluqueño en SAD. Coke y Cala se han puesto manos a la obra en el que será su primer proyecto profesional desde los despachos. Y qué despachos, porque la inspección previa a la Navidad de la Seguridad Social ha dejado un regalo en forma de liquidación de 373.000 euros, cantidad que si suma a todo lo desembolsado ya por los nuevos gestores más lo pendiente en personal y proveedores, sitúa la deuda global del club en torno a los 900.000 euros.

Son valientes estos toreros verdiblancos, de eso no me cabe duda. Como tampoco me cabe duda de que son inteligentes por mucho que nos pueda parecer ingenuos o mal encaminados sus primeros pasos en la confección de su primera plantilla.

Como hemos dicho, la canícula veraniega, ese periodo del año que donde se registran las más altas temperaturas, también afecta al mercado de fichajes. Y es que parece que jugadores y clubes han entrado en una espiral de contrataciones que pareciera inminente el inicio de la temporada.

Para los más tempraneros faltan 30 días para el inicio de la pretemporada y mínimo 60 para la competición, por eso quien ahora sabe templar gaitas y sobre todo manejar ansiedades, puede sacar rédito en forma de buenos fichajes cuando la canícula afloje.

Coke y Cala tienen un plan y están cumpliéndolo a rajatabla, el tiempo nos dirá el resultado. Equipo con hambre, apuestas deportivas y gente que conoce la categoría en manos de un experimentado gestor de grupos y con dos ases debajo de la manga: los cedidos que puedan llegar de la carretera de Utrera y los del Rosal, y los cuatro a cinco fichajes que llegarán para formar la columna vertebral de la plantilla.

Y es que como con el cambio climático, las cosas del fútbol también han cambiado en la casa verdiblanca. Dejémosles trabajar porque de no ser por su valentía, ahora mismo quizás no estaríamos discutiendo sobre si los fichajes ilusionan o no. Coke y Cala han llegado para dar estabilidad al club y nadie pone dinero en un negocio para perderlo. Por ello tengamos un poco de paciencia y demos el tiempo que toda semilla que se siembra necesita para germinar y convertirse en una planta robusta y hermosa.