El reto de actualizar el comercio tradicional de Málaga
Solo el 31% de los comercios tradicionales de Málaga venden online
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Málaga
Tan solo el 31% de los comercios tradicionales en la ciudad de Málaga cuentan con un sistema de venta por internet. Así lo revela el estudio sobre el sector encargado por el consistorio a la Facultad de Comercio y Gestión de la UMA. El diagnóstico forma parte de la estrategia del ayuntamiento para contribuir a la supervivencia de los establecimientos de proximidad. Sin embargo, a pesar de que no estén a la vanguardia en este sentido, el dato choca con que la mayoría de estos establecimientos usen las redes sociales para promocionarse. El 88,6% utiliza el canal de Facebook como herramienta publicitaria y el 64,9% lo hace con Instagram.
Los datos del estudio reflejan la necesidad de intensificar la digitalización en los comercios y la hostelería para aumentar la competitividad de cara a las grandes superficies. Además de esta transformación tecnológica, entre los grandes retos del sector se encuentra el desarrollo de nuevas formas de atracción, retención y dinamización del cliente. Hoy hemos querido hablar de ello en SER Málaga con Elisa Pérez de Siles, concejala de comercio del ayuntamiento de Málaga, Carmina Jambrino, vicedecana de la Facultad de Comercio de la UMA (una de las autoras del estudio) y comerciantes.
Negocios tradicionales como el de Isabel Utrera, una droguería-perfumería ubicada en Huelin llamada “Venus” que puso en marcha su abuela en 1.952 en la que ahora trabajan ella y su marido junto a otros empleados. Un comercio de los de toda la vida que lucha frente a gigantes de la venta online con la atención y el servicio de proximidad a sus clientes e incluso el reparto a domicilio, a través de WhatsApp. La óptica Fernández-Baca en la Plaza de la Constitución (antes en calle Granada) abrió sus puertas en 1913, su actual responsable Rafael Prado ya es la cuarta generación que trabaja en el negocio. Este establecimiento cuenta con página web, un esfuerzo que según Prado suele recaer en los propietarios de los comercios y que es difícil de asumir.
