De sequías históricas en Córdoba
Firma de opinión de Alfredo Romeo, en Hoy por Hoy Córdoba
De sequías en Córdoba. Firma de opinión de Alfredo Romeo en Hoy por Hoy Córdoba
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Córdoba
Padecemos una horrorosa sequía, varios meses sin llover, y parece que el mantra es común en todas las conversaciones o noticias de los medios de comunicación: la sequía es achacable al cambio climático por la acción humana. Sin embargo, cuando conoces de primera mano episodios de sequía en la ciudad de Córdoba que fueron horrorosos y que tuvieron lugar durante diferentes siglos, no puedes dejar de pensar en ellos para relativizar lo singular de lo que estamos viviendo ahora.
Por ejemplo, en Córdobapedia que tenemos un artículo sobre sequías entre el siglo XVI y el XVIII procedente de diferentes fuentes, recoge la sequía del año 1722 que dicen las crónicas que “fue tan seco que no llovió en todo el año y los manantiales se apuraron en términos que se secaron las fuentes y los pozos y perecían las gentes y los ganados.”
En ese año no había parcelas con extracciones ilegales de agua ni conducíamos coches expulsando CO2 a la atmósfera; simplemente era un ciclo más del clima, que encadena periodos de sequía y humedad desde que la Tierra existe.
Les cuento esto para que pongamos en perspectiva el periodo climático que nos toca vivir; que la sequía que vivimos no es la peor de la historia, a las pruebas me remito y que, sobre todo, la sufrimos desde el bienestar que da el avance de la tecnología que nos ha permitido durante siglos ir adaptándonos a esos periodos; esa es la razón por la cual hemos venido construyendo embalses para paliar la falta de agua (obras concebidas entre finales del siglo XIX y mitad del XX) o de contar con aires acondicionados en el 75% de los hogares.
El pueblo de Córdoba, al menos bimilenario, ya ha pasado por estos episodios y volveremos a pasar y nos levantaremos de nuevo, entre otras cosas porque es nuestra condición humana: que no nos metan miedo, que para eso ya tenemos el precio de la luz.