"Desesperanza en el olivar" ante las escasas lluvias de este martes según Coag Jaén
Las precipitaciones, según la AEMET, apenas han superado los cinco litros en algunos puntos de la provincia con lo que el olivar de secano es "prácticamente irrecuperable" tal y como apunta la organización agraria
Jaén
Los restos de la tormenta tropical Danielle que han cruzado este martes la Península Ibérica finalmente han dejado menos lluvias de los esperado lo que supone un nuevo mazazo para los agricultores jienenses después de varios meses de sequía. De hecho, según los datos recogidos por las diferentes estaciones que la Agencia Estatal de Meteorología tiene en la provincia, las precipitaciones no han ido más allá de los cinco litros por metro cuadrado en puntos como Linares mientras que en la capital la cifra se reduce a 3,2.
Todo ello, según la Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas de la provincia son "menos de las previstas" lo que ahonda todavía más en la "desesperanza del sector". El secretario provincial, Juan Luis Ávila, asegura que la situación en el olivar de secano "se puede dar ya por perdida". De hecho, apunta a que en zonas como Alcalá la Real o Pegalajar no se va a llegar al 20% de la cosecha mientras que alertaba de que algunos árboles de secano ya han empezado a secarse por falta de agua. Recuerda que, debido a la sequía, "los olivos han florecido tarde y con poca fuerza", algo generalizado en la cuenca mediterránea según informes de la UE.
En el caso del regadío, la organización plantea tres escenarios. En primer lugar, en los que se empezó a regar pronto, pueden tener una cosecha media pero, recalca, que con la dotación de agua casi agotada, tienen una situación difícil ya que necesitan "que llueva para tener aceite". A todo ello se suma que han gastado mucha electricidad para poder regar "y sus costes de producción serán muy altos".
En segundo lugar, están los olivareros que regaron desde el principio con riegos más espaciados y menores. En este caso, se espera que la cosecha sea "media-baja" con menores gastos de electricidad pero que necesitan lluvia para que la aceituna tenga aceite. Por último, están lo olivos que se abastecen de pozos profundos. En este caso "han podido regar, pero les ha servido para mantener el olivo, con una escasa o sin cosecha".
Próxima cosecha
Ávila asevera que, con la campaña actual ya perdida, "con un descenso del 60% respecto a la anterior", el olivar jiennense necesitaría como mínimo que lloviese entre 70/80 litros por metro cuadrado entre septiembre y octubre para salvar algo la próxima cosecha que "ya se está viendo afectada". Reclama "medidas potentes" a la Junta y al gobierno central "que nos permitan enfrentarnos a una campaña que no va a ser de 12 meses sino de 24" al recordar que el notable incremento de los costes de producción ha echado por tierra el incremento del precio en origen.
César García
Licenciado en Periodismo. Comenzó a trabajar...