Doctor Callejas: "El video de la tormenta de citoquinas era para los colegas de promoción, y mira"
El jefe de la unidad de Enfermedades Sistémicas del San Cecilio da por superada la pandemia dos años y medios después de la explicación que le convirtió en héroe
Entrevisa a José Luis Callejas, jefe de la unidad de Enfermedades Sistémicas del Hospital Clínico de Granada
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Granada
Afortunadamente para la ciencia, la investigación y nuestro sistema sanitario, José Luis Callejas (Granada, 1969) descubrió muy tarde su pasión y talento por el ciclismo. Prepara con entusiasmo la afamada prueba Quebrantahuesos, vacila con una foto junto a Miguel Induráin tras correr junto a él en Villava hace unas semanas, y es jefe de filas en la nutrida escuadra de cincuentones Francisco Árbol Abogados. "El ciclismo es una válvula de escape fabulosa para equilibrar mi día a día, y salgo siempre que puedo", reconoce Callejas, que se presenta en Radio Granada enjuto y afinado, con apariencia de ciclista profesional en plena temporada.
Después del video, de cuando nos explicó cómo combatir la ya afamada tormenta de citoquinas que desencadena en el organismo la Covid-19 en determinados pacientes, le ha sucedido de todo: sabe lo que es competir con Cristina Pedroche dando las campanadas en Canal Sur, ha recibido la Medalla de Oro de la provincia, ahora es jefe de la Unidad de Sistémicas del Clínico... y hasta le denunció un compañero acusándole de que su recomendación de atacar con corticoides desde el minuto cero era poco menos que un suicidio apocalíptico.
"Yo grabé el video para unos colegas de promoción, quién iba a saber todo lo que pasó después", dice Callejas, que rotulador en ristre soltó una explicación furtiva, en tono espontáneo pero "con base científica" que pronto se convirtió en protocolo anticovid en medio mundo.
Como un entrenador de baloncesto en un tiempo muerto, pizarra en mano, Callejas, coloquial y motivador, hasta con algún taco retórico, ofreció al universo sanitario una fórmula para salvar vidas en cinco minutos para la historia. Él le resta importancia... y sigue pedaleando duro buscando la cumbre.