Importancia del agua y los regadios

Jerez de la Frontera

Comenzamos un nuevo año agrícola con muchas incertidumbres en el sector, en primer lugar, con una nueva campaña de la que ya tenemos que tomar decisiones en cuanto a las siembras, pero que a día de hoy desconocemos la legislación a aplicar en esta campaña. En segundo lugar, con unos costes de producción que se han multiplicado por 2 y por 3 en muchos de nuestros inputs y en tercer lugar con una carencia de agua cada vez más preocupante en nuestra provincia. Concretamente, los embalses de Barbarte y Celemín apenas están al 13 y 14%, mientras que el Guadalete está al 25% cuando en esta misma fecha el año pasado se encontraba al 36%. Hay que decir que la provincia sigue necesitando inversiones de las distintas administraciones en materia de agua. En España tenemos unas magníficas autopistas y autovías para los coches, unas excelentes comunicaciones en trenes de alta velocidad, pero ¿por qué no podemos tener unas autopistas del agua y esa agua que se vierte al mar en el norte de España la aprovechamos en zonas deficitarias? Donde hay agua, hay economía, hay mano de obra, hay empresas de servicios, hay pueblos vivos y en definitiva hay riqueza y valor añadido. Además, hay que decir que el agua que los agricultores y ganaderos utilizamos no está en el campo, el agua está en esos alimentos que los consumidores tenemos a nuestra disposición. El agricultor y ganadero ya está haciendo un uso sostenible del agua, el agua además de un factor limitado es un factor muy caro a día de hoy. Por tanto, somos los primeros en optimizar esa agua, pero necesitamos unas administraciones que apuesten verdaderamente por los regadíos. Y para ello un ejemplo, la Alqueva en Portugal, con una superficie de 250 Km² y una capacidad de 4.150 hm³ (800 hm³ Guadalcacin) para regar 110.000 has. El embalse de la Alqueva pese a muchos, ha conseguido transformar una zona deprimida, y abandonada en una región rica en producción donde hay futuro para nuevas generaciones.

En estos días los agricultores y ganaderos miramos al cielo esperando que comiencen las precipitaciones y que sean muy cuantiosas, ya que las reservas están muy exiguas y las necesidades son muy importantes.