'No mires a los ojos' y 'Vasile'
Dos estrenos, premiados en la SEMINCI, llegan a la cartelera
Se estrenan dos de las películas premiadas en la 67 Semana Internacional de Cine de Valladolid: “No mires a los ojos” y “Vasil”, y ambas contienen ingredientes suficientes para acudir a verlas.
La primera de ellas fue la encargada de inaugurar el certamen y adapta la novela de Juan José Millás, “Desde la sombra”. En el delicado tema de las adaptaciones literarias al cine, sale airoso el director de la cinta Félix Viscarret, que coescribe el guion junto a David Muñoz. No en vano ya lleva algunas traslaciones a la pantalla de novelas de Fernando Aramburu y de Leonardo Padura.
En el caso de “No mires a los ojos”, al tener un componente de suspense, procuraremos no desvelar demasiado de su compleja trama. El punto de partida es el despido laboral del protagonista, que provoca una huida impulsiva y su ocultamiento en un armario que va a ser entregado en una vivienda. A partir de ahí este hombre irrumpe secretamente en la intimidad de ese hogar.
En esta obra, como en otras de Millás, encontramos a un individuo que colisiona con el modelo de normalidad establecido. Y Félix Viscarret ya demostró, por ejemplo, en la serie “Patria” que sabe representar mundos en conflicto. Además, ha sabido trasladar la particular concepción de la realidad de Millás, en cuyos textos se aprecia una oposición entre lo real y lo ficticio, porque aquello que se encuentra en la mente humana no es más que una realidad modificada, recreada por la imaginación.
Pese a que la película transcurre en mundos muy cerrados, con un fuerte contraste entre lo que vemos en la superficie y lo que ocurre bajo ella, está filmada de forma luminosa, con una brillante puesta en escena e interesantes coreografías de cámara que hacen que en las escenas filmadas dentro del armario el espectador se sienta encerrado junto al protagonista. Y pese a la intensidad, el desconcierto y lo inquietante de la trama, también hay situaciones que generan bastante humor.
Por otra parte, Juan José Millás es un autor que ha compartido su labor literaria con su actividad periodística y por ello este aspecto se integra en la novela y también con acierto en la película, que nos invita a reflexionar sobre la telebasura y el periodismo serio y riguroso, encarnado en Iñaki Gabilondo. También se expone el tema de las redes sociales. En definitiva, esa mirada atenta a la realidad y a los cambios socioculturales, con la finalidad última de ahondar en la condición humana, que nos deja unos cuantos interrogantes que hacernos.
Hay que destacar el reparto, al frente del cual se sitúa un Paco León muy diferente al que solemos ver. Muy acertadas también las representaciones femeninas, en las que destaca especialmente el personaje interpretado por Leonor Watling, atrapada en una vida que no le satisface del todo y cuyo refugio es la memoria del pasado o la imaginación. Completan el equipo de actores: el extraordinario Alex Brendemühl, Susana Abaitua, María Romanillos, Juan Diego Botto y Marcos Ruiz.
En la banda sonora compuesta por Mikel Salas, se integran el tema “Más de la mitad”, escrito e interpretado por la cantante Amaia, y la célebre canción de Golpes bajos, “No mires a los ojos de la gente”.
Por todo lo expuesto la asociación Periodistas Iberoamericanos de Cine ha otorgado a la cinta el galardón de Mejor Película Iberoamericana de la Seminci.
También ha sido premiada en el certamen vallisoletano, “Vasil”, ópera prima de la directora valenciana Avelina Prat, a la que ya conocíamos por su trabajo como script de grandes directores como Fernando Trueba, Manuel Martín Cuenca o Cesc Gay. Prat firma también el guion de la película, con el que ya había ganado en Berlinale Talents Script Station, además de participar en el V Laboratorio de escritura de guiones de la Fundación SGAE dirigido por Isabel Coixet, que ha sido impulsora del proyecto.
Partiendo de una experiencia personal de su propio padre, que acogió en su casa a un inmigrante búlgaro que estaba durmiendo en la calle, la directora construye una ficción donde la realidad social se funde con cierto aire de fábula. Un relato amable sobre las dificultades de comunicación, cargado de humanidad, que nos invita a reflexionar sobre cómo la llegada a nuestras vidas de una persona desconocida puede desencadenar en nosotros una transformación y dejarnos una huella indeleble.
Iván Barnev y Karra Elejalde han recibido merecidamente el premio a mejor actor (ex aequo) de la Seminci por encarnar con tanta humanidad a los protagonistas de esta historia de amistad y acogida que desde aquí les recomiendo.