Palmas a las nuevas generaciones del Flamenco en Córdoba, aplausos a la herencia del cante jondo
Juan Tomás ‘De la Molía’ y Rafa ‘Del Calli’, ganadores del XXIII Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba, que ha dejado desierto el premio de guitarra

Rafa Del Calli, durante el Concurso de Arte Flamenco de Córdoba / IMAE

Córdoba
El Gran Teatro ha acogido en la noche de este sábado la entrega de premios del XXIII Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba. Un certamen, ha recalcado el alcalde de la ciudad, José María Bellido, “que supone abrir las puertas a nuevos artistas y creadores que quieren demostrar su valía sobre las tablas del escenario”.
En este sentido, ha asegurado Bellido, “el Flamenco es patrimonio de nuestra tierra y también de toda la humanidad, porque el toque, el cante y el baile nos proyectan en el mundo y muestran nuestra identidad y raíces”. Así, ha repasado la vinculación de la ciudad con los Palos al tiempo que destacaba que “hay una apuesta de futuro por este arte, porque el Flamenco se estudia en el conservatorio, en la escuela de danza y en la universidad; porque tenemos figuras de primer nivel y porque contamos con el Centro Flamenco Fosforito”.
Precisamente Antonio Fernández, ’Fosforito’, ha ocupado un papel protagonista en la ceremonia, al haber sido reconocido como presidente honorífico del jurado del Concurso. Su mano cubierta de escayola —por una fractura reciente— se contraponía a las de un auditorio que le ha recibido en pie, con un aplauso atronador. Durante su intervención, Fernández se ha declarado “emocionado porque os hayáis acordado de este viejo cantaor, que sigue enamorado de una música que está en mi sangre”.
El artista confiesa “seguir enamorado de los matices, la calidez y la viveza del Flamenco, por el cual me he dejado el alma por todo el mundo”. ‘Fosforito’ ha reivindicado el concurso cordobés como un impulso a este arte, “que está falto de afectos”. Y aunque de sus palabras se ha desprendido cierta preocupación por el relevo generacional del cante, la juventud del elenco de artistas seleccionados como finalistas del Concurso desmentía esa opinión.

Antonio Fernández, Fosforito, durante la gala de entrega de premios del XXIII Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba / rafa alcaide

Antonio Fernández, Fosforito, durante la gala de entrega de premios del XXIII Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba / rafa alcaide
Pero en las formas de arte las fortalezas se miden, para bien o para mal, en la cantidad de personas que las contemplan. Y lo cierto es que la entrega de premios de esta edición no ha conseguido completar el patio de butacas del edificio del Instituto Municipal de Artes Escénicas, mientras los palcos apenas se han ocupado.
PREMIO DE BAILE: JUAN TOMÁS DE LA MOLÍA
En esta edición, el primer premio de baile ha recaído en Juan Tomás Domínguez, en un categoría en la que han sido finalistas Lucía La Bronce, Carmen La Talegona e Irene Rueda.
Sobre la madera, Domínguez ha desplegado un espectáculo que se balanceaba entre la rapidez y la elegancia, entre la fuerza y el equilibrio. Una actuación que empezaba —problemas leves de sonido mediante— con una Soleá melancólica a la guitarra desnuda de Juan Campallo, que minutos después rompía el crujir de un zapateo. Con 22 años, De La Molía propone un baile casi provocativo, con alternancias de velocidad y que juega con la percusión corporal. Pronto, la tristeza se ha disipado en una fiesta enérgica de palmas y jaleos.

Juan Tomás De La Molía / IMAE

Juan Tomás De La Molía / IMAE
El joven asegura “estar cumpliendo un sueño, porque todos los participantes eran dignos de estar hoy aquí subidos”. Pese a reconocer el “prestigio especial” que concede la distinción del concurso cordobés, es consciente de “la necesidad de seguir trabajando y exportando el baile al extranjero, donde siempre me reciben con los brazos abiertos”.
EL PREMIO DE GUITARRA HA QUEDADO DESIERTO
El jurado no ha considerado distinguir con un primer premio ninguna de las propuestas finalistas en la categoría de guitarra de esta edición. Así que de la mano del alcalde de Córdoba y del delegado del gobierno de la Junta de Andalucía en la provincia, Adolfo Molina, han recibido la distinción como finalistas Alba Espert, Niño Martín, Daniel Mejía y Alfonso Linares.
RAFA DEL CALLI, PREMIO DE CANTE 2022:
“Este premio tenía una especie de deuda con mi familia”, decía orgulloso Rafael Plantón, hijo de una dinastía cordobesa del cante jondo que se ha alzado con la máxima distinción en esta categoría. Su padre fue finalista del certamen y, pese a su ausencia, ha ocupado el momento cumbre de la actuación de Rafa Del Calli, cuando ha interpretado la canción que compuso tras el fallecimiento del que fuera propietario de la taberna La Bulería.
Plantón hijo tiene una voz grave que salta con facilidad a las notas más altas. Ni es arenosa ni especialmente limpia. No lo necesita. Sus armas sobre el escenario son la dinámica y el vibrato para desplegar un cante hundido en las raíces.
Destaca cómo se desenvuelve en los tiempos más lentos, aunque se lo ponía fácil la guitarra de Luis Medina, que opta por la selección de las notas precisas frente a la exhibición de velocidad. Así, han impresionado rasgueos finos y cortantes mezclados con arpegios limpios y que incorporaban glissandos que casi rememoraban los orígenes del género.
Junto a las palmas de Alberto Rodríguez y Richard Gutiérrez, Rafa Del Calli ha concluido su exhibición de cuatro temas implorando “que el flamenco no se pierda, hay que cuidarlo y es nuestra herencia”.

Álvaro Guerrero Jiménez
Redactor y editor en los servicios informativos de la Cadena SER en Córdoba. Previamente ha trabajado...




