Clínica Dental Sanitas Aljarafe nos enseña cómo afrontar el miedo al dentista

Dra. Pancorbo nos ha contado que, para vencer el miedo al dentista, “el punto de partida es hacerles ver a los pacientes que nuestra prioridad es ayudarlos y darles una solución. Para ello, la concienciación es muy importante. Aunque son conocedores del problema, porque son quienes lo padecen, no lo son tanto de los riesgos de no atajarlos”. “Ofrecer una información clara, detallada y dedicarle el tiempo que se merecen es fundamental” -asegura-.

Es muy común que ese miedo vaya asociado a una mala experiencia anterior. ¿Qué se puede hacer ante este escenario? La solución, según la doctora, es “la comunicación con el paciente, que nos va a ayudar a saber cómo planificar su tratamiento”. En estos casos se recomienda comenzar por la fase más liviana, como puede ser la conservadora (higiene, alguna reconstrucción…) para las que el tiempo en gabinete es más reducido. “La reconciliación debe ser gradual. El paciente comprobará que hay ausencia de dolor en el tratamiento, se irá relajando y eso nos ayudará a dar el paso, por ejemplo, a la fase quirúrgica, que es de las más inquietantes para ellos”.

La doctora Pancorbo se refiere a los implantes que, dentro de la especialidad, son los que más respeto producen: “Curiosamente la mayoría de los pacientes sienten temor sin saber en qué consiste el tratamiento. Magnifican la cirugía en sí, cuando la realidad es que es un tratamiento que en la práctica es muy preciso y sencillo. Apenas necesitamos 30 minutos para colocar un implante unitario”.

Para casos en los que hay que realizar rehabilitaciones de arcadas completas, Clínica Dental Sanitas Aljarafe tiene la posibilidad de recurrir a la sedación consciente, como opción para que el paciente esté aún más tranquilo. Además, esta técnica lleva asociada un mejor postoperatorio.

“Un dato muy significativo a tener en cuenta –desvela la doctora- es que los pacientes que son sometidos por primera vez a un tratamiento de implantes en nuestra clínica manifiestan su arrepentimiento de no haber dado el paso antes una vez que saben en qué consiste”.

La visita al dentista, según Ángela Pancorbo, es una cuestión de educación que “debe comenzar con los más pequeños. Nuestras consultas de Odontopediatría están llenas de niños que acuden simplemente a revisiones, a verificar que todo está en orden. Muchos de ellos, ya adolescentes, siguen siendo fieles a sus visitas anuales, ahora con los doctores generales. La idea de que hay que acudir al dentista cuando hay un problema es errónea, la mejor cura es la prevención. Si ese hábito no ha existido, nunca es tarde para adquirirlo, primero recuperando la salud de la boca y después manteniendo las visitas anuales”