Un nuevo tiroteo indigna a los vecinos de la Palmilla, que exigen soluciones para acabar con las armas de fuego en la barriada
El último suceso tuvo lugar el pasado viernes, cuando residentes de la barriada tuvieron que tirarse a suelo de sus casas ante el temor de que les pudiera herir una bala perdida, como ocurrió durante un tiroteo en 2020
Málaga
El último tiroteo en Palma Palmilla el pasado viernes ha hecho saltar por los aires los ánimos de los vecinos de esta barriada malagueña. Este último enfrentamiento se produjo con armas automáticas en la noche del 5 al 6 de mayo en el bulevar Mari Ángeles Arroyo. No se produjeron heridos, aunque sí hubo daños materiales en varios edificios, un local comercial y coches, según el comunicado remitido por el Proyecto hogar de la barriada, el plan comunitario de actuación en esta zona de especial vulnerabilidad. El tiroteo provocó que algunos residentes se tiraran al suelo en sus viviendas mientras escuchaban denotaciones, con miedo a acercarse a las ventanas, ante el riesgo de sufrir un disparo, tal y como ocurrió el 5 febrero del año 2020, cuando un vecino del distrito de 74 años murió por una bala perdida que atravesó la ventana de su domicilio en el transcurso de una reyerta.
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En el comunicado de Proyecto hogar se denuncia este último altercado y se advierte que el vecindario "pedirá cambios en la Subdelegación del Gobierno y responsables policiales si no se erradican las armas de fuego". Recuerdan que ya pidieron que se actuara el pasado mes de enero sin haber obtenido respuesta. "Además de condenar estos hechos, el vecindario advierte de la gravedad de que vuelvan a ocurrir tras meses esperando una respuesta por parte de la Subdelegación a las peticiones de información e intervención sobre las armas de fuego en el barrio", sostienen desde el plan comunitario.
El pasado mes de enero ya indicaban desde esta red donde se incluyen de colectivos, asociaciones y administraciones que la preocupación del vecindario era muy elevado y que estaba muy angustiado por la situación: "la inmensa mayoría es gente pacífica que se esfuerza por superar sus problemas y que no es cómplice ni partícipe de estos hechos, porque la primera víctima de esta situación es la tranquilidad y el normal ejercicio de las libertades. La segunda víctima es la imagen de esta zona. Todos los esfuerzos realizados por la gente, las asociaciones y las administraciones públicas para propiciar el desarrollo en Palma Palmilla y una percepción justa por parte del resto de la ciudad son desbaratados por quienes no saben canalizar sus problemas por vías pacíficas y, en cierta medida, por quienes toleran que lleguemos hasta aquí por acción u omisión". "El deterioro de la imagen no es solo una pérdida moral para nuestra comunidad, sino que tiene consecuencias en las condiciones materiales de vida de la gente, en sus oportunidades para conseguir trabajo y relacionarse con normalidad" añadían.
Nieves Egea
Redactora de Informativos de SER Málaga. Especializada en información municipal. Ha cubierto en las...