Gabriel Pérez Alcalá: "Loyola no es una universidad elitista"
Tras doce años como rector de la Universidad Loyola Andalucía, Gabriel Pérez Alcalá se prepara para dar el relevo al frente de la institución que el mismo levantó. En Hoy por Hoy Córdoba ha repasado su trayectoria, hablado de economía y de política.
El rector de la Universidad Loyola dejará el próximo mes de septiembre el cargo que ocupa desde el año 2012 / Cadena SER
Córdoba
"Espero ser mejor ex rector que rector he sido, y cometer menos errores". Con esta declaración de intenciones ha comenzado la charla que este jueves hemos mantenido en Hoy por Hoy Córdoba con quien ha sido durante los últimos doce años el responsable de una de las más importantes universidades privadas de Andalucía. Gabriel Pérez Alcalá dejará el cargo el próximo mes de septiembre porque así lo dictan las norma de la Compañía de Jesús, a la que pertenece la Universidad Loyola, y convencido de que el relevo generacional es bueno en una institución que trata con la juventud. " Yo ya soy sesentón, y estoy muy lejos de comprender a la generación nueva", ha dicho. No obstante, "dejo el cargo con alegría. Sabía que este momento iba a llegar y lo he aceptado sin ninguna dificultad", ha añadido. Y por si alguien tenía alguna duda, nuestro invitado afirma que todavía no sueña con una jubilación que sigue viendo muy lejana: "Tengo 62 años, pero tengo mucha cuerda y muchas ganas de seguir haciendo cosas".
Entrevista a Gabriel Pérez Alcalá
20:00
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Ser la persona que en 2008 lideró la transformación de una facultad de empresariales como ETEA en una universidad con casi 6.000 alumnos repartidos en tres campus en las provincias de Córdoba, Sevilla y Granada, le ha dado a Pérez Alcalá un notable prestigio como gestor, y sin duda ha contribuido a que le lluevan las ofertas para que destine parte del tiempo libre del que disfrutará a partir de septiembre en dar clases en universidades de Estados Unidos, Alemania o Australia. "Siempre está bien que a uno lo valoren. Se me encargó transformar ETEA en una universidad y hemos hecho una universidad de calidad, investigadora e internacional. Creo que he cumplido honradamente con mi deber". Un reto que, a pesar de lo descomunal, y de la época en la que se afrontó (en plena crisis económica), afirma que no le llegó a provocarle vértigo, "quizás porque soy un inconsciente".
Durante los doce años que ha ocupado el cargo de rector de la Universidad Loyola Andalucía, Gabriel Pérez Alcalá puede presumir de haber mantenido unas relaciones "muy cordiales" con la UCO, con la que dice haber competido de forma "leal", si bien "competimos muy poco porque nuestros grados son complementarios". No obstante, Pérez Alcalá niega que Loyola sea una universidad elitista. "No es cierto que no aceptemos a estudiantes por su nivel de renta. Tenemos un programa propio de becas que complementan a las públicas". Y añade que "no todas las universidades privadas buscan el beneficio económico; nosotros buscamos el bien social".
Siempre atento a la actualidad que le rodea (colabora habitualmente en la sección La Firma de Opinión, del programa Hoy por Hoy Córdoba) le hemos preguntado por las elecciones municipales que tendrán lugar el próximo 28 de mayo. " Ha sido una legislatura atípica, marcada por una pandemia. Juzgar los últimos cuatro años como haríamos con el resto sería injusto", ha dicho. Sobre los candidatos se ha limitado a señalar que cree que "Bellido ha hecho un buen trabajo", y que Hurtado "es un buen candidato. Tengo amistad con ambos. Al resto no los conozco tanto".
En cualquier caso, Pérez Alcalá ha lamentado que en la sociedad actual "se hable muy poco de economía". Y ha añadido que "tras la crisis de la industrialización de los 80, la de la joyería de los 90, y la de la construcción del 2008 lo hemos fiado todo al turismo y al comercio", por lo que no le sorprende los resultados de una encuesta según la cual 1 de cada 4 cordobeses, sobre todo jóvenes y universitarios, quieren irse de Córdoba para encontrar un trabajo. "Hace 20 años que vengo diciendo que Córdoba sigue adoleciendo de una política de industrialización profunda".
