Y el Alcázar...¿pa' cuándo?

Córdoba

El vértigo de las últimas horas en la agenda política y todas sus lecturas en el ámbito nacional hace que se nos olvide que venimos de unas elecciones municipales, esto es, las más cercanas al contribuyente. Una campaña electoral política y mediática, si es que alguna vez dejamos de estar metidos en ella, con mucho de claves macro y no tanto de soluciones micro, con grandes palabras de panfleto y manual de mercadotecnia partidista y pocas de soluciones concretas, sin demasiadas diferencias entre los colores de la papeleta. Y en lo que tiene que ver con el patrimonio histórico, bandera que, digo yo, debería ser la prioridad en la agenda de esta bendita ciudad que se vanagloria de nuestros cuatro títulos de la UNESCO y que vive del, por y para el turismo, la cuenta pendiente del Alcázar de los Reyes Cristianos es sangrante.

En lo que llevamos de siglo XXI hasta cuatro partidos distintos han regido los destinos del segundo monumento más visitado de la ciudad y el primero de titularidad pública, y su puesta en valor, recorrido y gestión de la visita sigue siendo algo inadmisible. Un acceso innecesariamente lento, espacios que siguen cerrados tras la pandemia sin justificación aparente, otros que deberían llevar abiertos lustros, una regulación de acceso a las torres innecesaria que genera tediosas colas, falta de elementos expositivos de valor, presencia de otros sin contexto, nula explicación de los restos arqueológicos, ausencia total de una narrativa que explique todos sus significados, y un futuro cambio en la puerta de ingreso que acabará siendo terrible en los muchos días de calor que lidera nuestra urbe. Querido pleno municipal… y el Alcázar, ¿pa’ cuando?