Seguimos estando ahí

Córdoba

No voy a negar que esta semana se me está haciendo cuesta arriba. No son buenos tiempos para la izquierda. Asistimos a una ola reaccionaria donde el individualismo campa a sus anchas en el cómodo y mullido colchón del neoliberalismo. Pero toca reconstruirse, arremangarse y, sobre todo, toca tener miradas de largo recorrido y dejar el ombligo tranquillo que ese ya lo tenemos muy gastado.

En Córdoba llevamos mucho haciendo real lo imposible. Lo hace mi vecino cada vez que comparte su cena en la puerta con el resto de vecindad. Lo hace el AMPA del colegio de mi hija, cuando beca la actividades extraescolares a las familias que no pueden pagarlo. Lo hace el comedor del Rey Heredia cuando prepara comida para 100 personas que sin este recurso no tendrían que comer. Lo hace la gente del Paseo San Julián que lleva años luchando por adecentar ese lugar. Lo hacen las gentes de Barrios por el Clima cuando deciden poner medidas contra el cambio climático desde abajo. Lo hacen los compañeros y compañeras de la red de trueque enseñándonos que otro tipo de consumo es posible. Los hace la Plataforma Cordobesa contra la violencia hacia las mujeres sensibilizando y educando a toda la ciudad. La ciudad la hacen sus gentes y en eso, los cordobeses y cordobesas somos especialistas.

Vienen tiempos difíciles, no nos engañemos. Pero que no nos hagan creer que el campo está arrasado. Seguimos estando ahí, creando y generando espacios de resistencia. Luchando desde los frentes que sean necesarios. Construyendo puentes y caminos.