"Queremos luz, para eso la pagamos": el grito de los barrios periféricos de Sevilla contra los cortes de suministro eléctrico

Sevilla

Un centenar de vecinos y afectados por los cortes de luz en los barrios periféricos de Sevilla se han concentrado a las puertas de la oficina comercializadora de Endesa en la calle Luis Montoto. A las puertas de la oficina, los afectados han denunciado interrupciones incomunicadas en el suministro que, a veces duran horas, días o, en algunos casos, prolongados durante semanas.

Es una protesta convocada por la plataforma Barrios Hartos, que aglutina a barrios de los distritos Sur de la capital como Padre Pío, Palmete o Su Eminencia. En las "últimas semanas", la plataforma Barrios Hartos -que centraliza la protesta de los barrios afectados por los cortes de luz- ha recabado alrededor de 600 reclamaciones.

Barrios Hartos ha confirmado que se seguirán sumando más reclamaciones, ya que están previstas nuevas asambleas en Amate y Torreblanca. Igualmente, la plataforma no descarta retomar acciones ya realizadas hace justo un año, como la ocupación de centros cívicos para desde allí poder centralizar las medidas a adoptar.

El portavoz de Barrios Hartos, Juan García, ha sostenido que los afectados "desisten" a veces de reclamar porque "no quieren que les indemnicen con 80 euros al día. No reclaman esto. Lo que quieren es que se acabe esto que desordena la vida". En estos momentos, hay zonas de la ciudad que sufren cortes de luz de hasta catorce horas diarias.

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Las asambleas se han celebrado en Palmete, Padre Pío y en Su Eminencia. El fin de estas reuniones es "fijar un día y un lugar para denunciar" la situación derivada de los cortes constantes de luz. "Las personas mayores se tiran todo el día colgadas al teléfono para dar parte de las incidencias, los niños lloran de madrugada del calor, los que necesitan respiradores no pueden usarlos... Es aberrante", criticaba Juan García.

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Aunque las vías legales están "abiertas", son "lentas", reconocen los afectados. "No podemos esperar", apuntaba el portavoz de Barrios Hartos, para el que la plataforma "confía en la movilización colectiva y social para presionar a quienes tienen que tomar cartas en el asunto". Para Barrios Hartos, "hay cómplices" en lo que está ocurriendo con el suministro de la luz y se pregunta: "¿Qué tiene que ver el cántico de la marihuana con que las infraestructuras tengan 70 años?". "Es un argumento pantalla que no les va a salir gratis", apostillaba Juan García.

La Fiscalía de Sevilla ha abierto diligencias informativas a raíz de la denuncia de la plataforma Nosotros también somos Sevilla y que instruye el propio fiscal jefe de Sevilla, Luis Fernández Arévalo. Los colectivos vecinales atribuyen a Endesa una supuesta falta de inversión y mantenimiento en las infraestructuras energéticas de estas zonas, llamando a diferenciar entre "los sinvergüenzas" que instalan las acometidas ilegales para alimentar plantaciones interiores de marihuana y quienes sí abonan sus correspondientes facturas de electricidad o quienes sufren una situación de agudizada falta de recursos como para pagarlas.

Rubén Sánchez, portavoz de Facua, ha dado su opinión sobre estas diligencias abiertas en Hoy por Hoy Sevilla: cree que esto podría ser “un recurso por posible delito al patrimonio, por los bienes que hay que tirar a la basura”. “La cuestión -sigue diciendo- es que llevamos años reclamando soluciones, y hasta ahora solo hemos conseguido alguna mesa donde sentarnos para hablar”.

Rubén Sánchez aconseja “reclamar dinero cuando se nos estropeen los alimentos, o nos tengamos que ir fuera a dormir a un hotel, hasta se pueden plantear descuentos en las facturas por no recibir la prestación por la que se paga...”. Porque en el caso del “patrimonio” se puede cuantificar, pero ¿cómo se mide la pérdida de calidad de vida?”