Una cámara de la Estación Biológica de Doñana permite observar en tiempo real cómo se seca la laguna de Santa Olalla, la más grande del espacio

En unas semanas habrá desaparecido lo que queda de agua en el vaso de la laguna de Santa Olalla, la más grande de Doñana. El verano pasado ya saltaron las alarmas cuando se secó esta laguna permanente que, por su naturaleza no debía de secarse nunca. Su secado enciende las alarmas de la crítica situación en la que se encuentra el sistema lagunar del espacio protegido.

Este secado se puede observar en directo gracias a una cámara que la Infraestructura Científica Técnica Singular (ICTS)-Reserva Biológica de Doñana ha instalado este viernes en el Parque Nacional de Doñana. Según los cálculos de los técnicos de la Estación Biológica de Doñana el proceso sucederá "de forma previsible a mediados de agosto, un par de semanas antes que el año pasado". Desde que la Estación Biológica de Doñana tiene registros, nunca antes esta laguna se había secado dos años consecutivos, lo que demuestra "el grave estado en el que se encuentra el sistema lagunar de Doñana".

Según recuerda la EBD, Santa Olalla es la laguna más grande de Doñana y se alimenta principalmente del agua subterránea del acuífero. "Está considerada como una laguna permanente, es decir, al contrario que otras lagunas más pequeñas, mantiene agua durante todo el año. A finales de agosto de 2022, finalizando el ciclo hidrológico, Santa Olalla agonizaba ante una de las desecaciones más intensa que había sufrido hasta entonces. La laguna ya se había secado por completo en dos ocasiones anteriores, pero nunca ante periodos tan largos de sequía extrema. La dramática imagen de la gran cubeta completamente seca dio la vuelta al mundo". Abel Valero, técnico de la Icts - Reserva Biológica de Doñana ha explicado que la intención es publicar el "último estadio en el que se va a secar la laguna por segunda vez, algo inédito, preocupante y que queremos poner de relieve". Valero ha indicado que esta iniciativa persigue hacer "divulgación" para que la gente sea conocedora de estas circunstancias. "La situación es precaria y hay que intentar mejorar las condiciones del acuífero, ya que la vida de Doñana depende del agua".

Para los científicos de este organismo que vela por la salud de Doñana, el secado de la laguna "evidencia la situación crítica en la que se encuentra el sistema de lagunas de Doñana, que da refugio a una gran biodiversidad y que constituye uno de los ecosistemas más valiosos del espacio protegido." Es por ello que la ICTS-Reserva Biológica de Doñana ha decidido instalar una cámara en la zona de la cubeta que fue la última en secarse el año pasado para monitorizar periódicamente su estado. La ciudadanía puede observar la retransmisión en directo a través de su página web http://icts.ebd.csic.es/cameras. Además de ésta, en el espacio hay instaladas otras cámaras:

El fenómeno viene determinado por múltiples factores. Entre ellos, según confirma la evidencia científica, la sequía es uno de los problemas más graves a los que se enfrenta el sistema lagunar de Doñana, pero también la sobreexplotación del agua del acuífero que lo sustenta. En un estudio publicado recientemente por la Estación Biológica de Doñana - CSIC, se constata que casi el 60% de las lagunas que existían en los años 80 han desaparecido ya. Además, el mismo estudio revela que el 80% se secan antes de lo esperado por la precipitación y un 84% se inundan menos de lo esperado por las condiciones climáticas, lo que demuestra que la actividad humana está alterando su equilibrio natural, según recoge la EBD en un comunicado.

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En otro estudio, la Estación Biológica de Doñana – CSIC ha revelado que la progresiva colonización terrestre de las cubetas de las lagunas debido a la escasa inundación es un buen indicador de su deterioro. Muchas de las lagunas de Doñana ya tienen sus cubetas repletas de pinos y matorrales, lo cual atestigua su imposible recuperación. Imágenes aéreas ya constatan que la vegetación terrestre también ya ha empezado también a colonizar Santa Olalla.