Albuñol trabaja para arreglar los desperfectos causados por las inundaciones del fin de semana

Motril

El Ayuntamiento de Albuñol, limpia los efectos que ha dejado el paso de la primera Depresión Aislada a Niveles Altos (DANA) del año hidrológico, con lluvias torrenciales en la tarde de este pasado domingo, por las que no ha habido que lamentar daños personales pero sí consecuencias materiales, entre ellas la anegación de la escuela infantil, que ha tenido que suspender temporalmente su actividad en la mañana de este lunes.

Las familias de los aproximadamente medio centenar de niños que comenzaban la semana pasada sus clases en esta escuela infantil han sido avisadas en la mañana de este lunes, cuando se ha revisado el estado de las instalaciones, para que los recogieran para llevarlos a sus casas, mientras se trabaja con la "mayor celeridad" posible, al igual que en el resto de áreas afectadas, principalmente el acceso a los núcleos de población y los caminos rurales.

Igualmente, el colegio de La Rábita ha amanecido inundado. Sánchez contacta este lunes con la Delegación de Desarrollo Educativo de la Junta en Granada para las actuaciones necesarias a una semana de que comience el curso. Son unas instalaciones donde se estaban realizando reparaciones en los tejados, ha detallado la alcaldesa.

El consistorio por su parte ya había terminado las tareas de mantenimiento que le corresponden en el colegio, incluida su pintura, ha añadido Sánchez, quien ha indicado que espera que en los próximos días pueda quedar solucionada la situación, al igual que en la escuela infantil.

El trabajo ha comenzado este lunes por una revalorización de las incidencias sobre la primera evaluación que ya se hacía en la tarde de este pasado domingo, con consecuencias muy "superiores" a las estimadas en ese primer momento, y por la activación de un programa de actuación, con máquinas limpiando en los accesos de los núcleos de población.

La regidora ha hecho un llamamiento, en este contexto, a sus convecinos para que "estén tranquilos" si bien desde el Ayuntamiento comprenden que "estén inquietos" por las consecuencias de esta gota fría, que también dejaba afecciones en la N-340.

Ha pedido a las administraciones ayuda para limpieza de ramblas y barrancos, algunos "colmatados", por lo que, de llegar próximamente lluvias torrenciales, habría una "catástrofe muy superior". Al igual que en los caminos rurales se va a pedir la colaboración económica de la Delegación de Medio Ambiente de la Junta.

En cualquier caso, el Ayuntamiento actuará "de urgencia" allá donde sea necesario con la idea de que luego sea compensado con las ayudas para temporales de la Junta, de la que Sánchez ha dicho que espera "sensibilidad", mientras se actúa también en edificios públicos para también normalizar su actividad "lo antes posible".

Rescate

También este pasado domingo, con la colaboración ciudadana, dos patrullas de Guardia Civil de Tráfico rescataron a un matrimonio cuando se dirigían hacia el paraje del Cortijo de los García, por la Rambla de Huarea, en La Rábita, en término de Albuñol, siendo estos "sorprendidos por la gran tromba de agua por la lluvia caída", quedando su coche en medio del torrente de agua.

También en Albondón y Murtas se han producido daños, que requerirán de actuación por acumulación de aguas de la Contraviesa.

Por otro lado, en Motril, en la mañana de este pasado domingo, por otro lado, en esta misma comarca, una mujer de 59 años fue rescatada por dos agentes de la Policía Local tras caer al cauce de una rambla que llevaba agua en la zona de Puntalón, "en un tramo particularmente aislado".

Con la colaboración de Emergencias 112 Andalucía, el cuerpo de seguridad municipal consiguió geolocalizar la llamada en la que la accidentada pedía ayuda, "conmocionada y con síntomas de dolor, pero consciente, llegándole el agua de la rambla por encima de las rodillas".

Lo ocurrido en Albuñol contrasta con la satisfacción en el sector agrícola por la lluvia caída en Almuñécar y La Herradura. Entre 20 y 25 litros por metro cuadrado se han medido en este punto. No obstante, el agua caída es insuficiente.

Los agricultores ya no piensan en tener una producción rentable sino más bien en sobrevivir. La falta de agua y el fuerte viento de las últimas semanas ha provocado la reducción de la producción de aguacate, por ejemplo, en un 75 por ciento así como en chirimoyo.