Amnistía y desconexión
La firma de Manuel Pareja en Hoy por hoy Jerez
Firma M.Pareja
Jerez de la Frontera
La ley de Amnistía que prepara el Gobierno en funciones para conseguir una investidura es un torpedo en la línea de flotación del Régimen del 78, ese que nos trajo concordia y avances nunca vistos antes en nuestra historia reciente.
Si usáramos la verborrea separatista, la amnistía es una fase inicial de la desconexión constitucional. Ni un TC hecho a medida -que a golpe de resoluciones enrevesadas le busquen encaje a esta infamia, podrá disimilar el impacto legal y moral que dejará una herida indeleble en la joven democracia española.
La Amnistía supondría no solo limpiar el historial de centenares de delincuentes sediciosos y golpistas, sino el reconocimiento de que el Estado actuó como un órgano represor, que los rebelados que alteraron el orden público y proclamaron una República en contra de la Constitución y el propio Estatuto de Cataluña, tenían razón. Y es que además es una puerta abierta a que lo vuelvan a intentar. Al fin y al cabo, la Amnistía les legitima para afirmar que quienes tenían razón eran ellos.
¿Tanto coste merece una investidura, unos años más de poder? La sola idea de negociar esa ley debería ser penalmente reprochable. No digamos llegar a promulgarla.