Granada

Un año más, esto es así desde hace once ediciones, el festival musical Granada Sound sirve de epílogo del periodo estival en la ciudad; y de anfitrión a todos cuantos vienen a la ciudad, ya sea como visitante, estudiantes o trabajadores.

La cita forma parte del ADN de The Music Republic, la empresa promotora que lo comenzó en la Plaza de Toros con el nombre de Alhambra Sound, y por el que siguen apostando de manera decidida. Además, ya tenemos las fechas de la edición de 2024: el 13 y 14 de septiembre.

Pero para eso falta un año. La cita del 2023 ya se mascaba el jueves 14. Ese día ya se comenzaban a ver miles de personas con las pulseras azuladas gracias al Astrosound, en evento paralelo que se celebra en la Fuente de las Granadas entre el Instituto de Astrofísica de Andalucía (CSIC) y TMR. Una buena oportunidad para conocer su labor, disfrutar de los sones de Cosmotrío y adelantar la consecución de las ansiadas entradas y lanzaderas que unen la ciudad con el recinto. De nuevo recaía la labor en ALSA y a diferencia de otros años sí observamos más celeridad en los trayectos, aunque la salida del recinto si tuvo momentos complejos y de largas esperas.

Estos eventos multitudinarios no solo los hacen los músicos, hay que sumar, técnicos, management, camareros, equipos de limpieza con una complicada y ardua labor, seguridad, accesos, además del público, que en general se comportó. Según pudimos conocer de los miembros sanitarios, no hubo nada reseñable o que revistiera gravedad, al menos hasta el principio de la noche del sábado.

Este año el plano se modificaba de forma sustancial desplazando la "Placeta CUPRA by Vigilsa" del centro del recinto al lateral, aunque sigue teniendo un problema de sonido grave ya que se cuelan de forma inmisericorde las notas musicales de los escenarios principales, arruinando por completo el concierto, salvo que te encuentres justo de frente. Y la otra novedad era la zona VIP que basculaba del lado derecho al izquierdo, ampliando el espacio libre, aunque en el concierto de Vetusta Morla el papel no soportó la idea y la movilidad era prácticamente nula en algunas partes. Sin duda alguna y en palabras de Antonio Romero, director de TMR, en las redes sociales, "Como todo en la vida hay que seguir peleando para poder mejorar..." y esto es algo que urge.

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El cartel

Ya centrados en lo puramente musical, el grupo local con el nombre de una céntrica calle granadina, "Niños Luchando", no para de dar alegrías y crecer con el disco "Territorios", una apuesta que se aleja del rock para adentrarse en una compleja oscuridad electrónica. Tras ellos, "Apartamentos Acapulco" con ese shoegaze reposado y sosegado, no exento de contundencia y que por méritos propios y contrastados deben estar en el escenario principal. Son tan originales que nos deleitaron con una Salve marinera, además de "Una galaxia" así como la presentación de "Milhojas" un adelanto que en breve lo tendremos en las plataformas de audio. Justo aquí nos encontramos con buena parte de los D'Baldomeros, el batería de los Acapulco, Jose, es hijo de Paco y si nos permiten la licencia, no nos quedó muy claro quién imita a quien en los movimientos.

Lo que fuera un goteo de "sounders" ya era una constante y es que a las 21.00H llegaban desde Burgos, los "héroes del sábado", también conocidos como La M.O.D.A. y que cuentan con una verdadera legión de seguidores por nuestra tierra. El folk como identidad para un buen puñado de temas, Gasoline o la Inmensidad por citar un par de ellas, nos sirven para ver como hay vida más allá del mal llamado indie.

Sin solución de continuidad llegaba Rufus T. Firefly con toda su maravillosa psicodelia sonora, matices revoloteando, Julia marcando el ritmo, la sorpresa de volver a ver a Anni B Sweet de nuevo junto a estos músicos o dejar Pompeya para el final para enlazar con Arde Bogotá. Sí queremos hacer un inciso e intentar entender cómo ante esa apuesta tan personal y decidida el público se dedicara a otros menesteres y optara por ir a la zona de restauración, mejor para los que nos quedamos férreos en nuestra posición.

De nuevo el granadinismo hacía acto de presencia de la mano de Modelé Fatale, poniendo punto y final a esos 100 conciertos donde el descaro, la simpatía, los dobles sentidos y la energía ha sido la seña de identidad.

Con Arde Bogotá nos venía a la mente su primera incursión local en aquel Granada Alive con todos sentados y como aquella sensación de estar ante algo grande no era equivocada. Gracias a su nuevo disco "Cowboys de la A3" han consolidado aquel "La Noche" y arrancar con ese leitmotiv "Soltar a los perros porque me he escapado" o invitar a Rafa Val de Viva Suecia para interpretar "Qué vida tan dura", nos hace imagen del peso que han tomado los cartageneros.

Pero aún tenían que hacer aparición los suecos de Murcia, si ya presentaron en Granada la gira de "El amor de la clase que sea" con todo el papel vendido se pueden hacer a la idea de la expectación que reinaba y como a modo de pequeñas píldoras se colaban "Algunos tenemos, fe", el imprescindible "Hemos ganado tiempo" y la marca de la casa con una traca final de cohetes y confeti espectacular con "Todo lo que importa", damos fe y pruebas de acabar con papelillos de colores dentro del calzado.

Una extenuante primera jornada que aún tenía a Varry Brava, además de Dj's por llegar y que con ese estilo a medio camino entre el festival y el toque eurovisivo sirvió para que no decayera el espíritu del Sound.

Así de intensa vino la primera jornada y la del sábado no se quedó atrás, con unos Karavana con su ya clásicos, "Tití me preguntó" o que Gonzalo bajara con el público a un pogo mientras sonaba "Strokes", así de cercanos e interesantes son ellos, una apuesta segura.

Llegaba el gran momento de esta edición por el gran respeto y admiración que le tenemos a Iván Ferreiro, una vida dedicada a la música y que forma parte de nuestra banda sonora. Es el artista completo por actitud, música, letras, alguien que sabes que nunca te va a fallar. Y lo hizo de una forma arrolladora, tirando incluso de un setlist bastante complicado, "Canciones para no escapar", "Como conocí a vuestra madre" y para finalizar "Turnedo", aunque ya avisó al principio del concierto que la tocaría ya que hace unos años se cayó de la lista.

El nivel de visuales, que ya forman parte indisoluble de los conciertos tienen a La Casa Azul como uno de sus baluartes y así ocurrió de nuevo. Guille Milkyway además de ser una verdadera enciclopedia musical sabe hacer temas que de forma unísona conectan con la gente y el sábado no dejó pasar esa oportunidad.

Hablando de momentos, conseguimos ver parte de Jordana B., una de las nuevas y jóvenes apuestas que más se está consolidando y no podemos más que estar de acuerdo con esa recomendación, no os las perdáis u os arrepentireis. Toda la capacidad de energía que son capaces de almacenar la sueltan como un torrente desbocado.

Sin pausa alguna nos dirigimos al Escenario Alhambra porque llegaban desde Tres Cantos, Vetusta Morla o lo que es lo mismo la banda por excelencia de la actualidad, "Cable a Tierra" es otra vuelta de tuerca en su sonido, acogiendo raíces e inquietudes musicales diferentes que bajo su prisma y sello para conformar un directo imprescindible en el panorama. "Cuarteles de invierno", "Te lo digo a ti" junto a Tania y Víctor de Ladilla Rusa o "Golpe Maestro" son temas ya transformados en himnos para muchos y así se hacía notar.

El momento amargo llegó con Second y es que tras 26 años de carrera se retiran, no sin antes habernos dejado ante un concierto inolvidable, un "Rincón exquisito" donde poder refugiarse ante la complejidad que nos depara la vida, se les va a echar mucho de menos.

Una vez repuestos llegaba el momento de coger el coche fantástico, esa locura de creación de Ladilla Rusa que es "KITT y los coches de pasado" o cantar todos ese "Solito en casa" de Macauly Culkin, en definición de una de las asistentes; "mortal" todo mientras reía y disfrutaba junto a sus amigas. Así son Tania y Victor una pareja que no deja indiferente, al igual que We Are Not Dj's, Yoli y Paco o viceversa, encargados de cerrar esta XI edición, ellos además están de X aniversario y que consiguieron sintetizar su sesión en una cascada de temas y así dejar en todo lo alto el momento de la despedida.

Sin duda el Granada Sound sirve como termómetro de la ciudad en cuanto a servicios, recursos y como interesante atractivo para muchos. No deja de ser un festival que evoluciona con la ciudad y que como ésta necesita mejoras, pero demuestra que está bien posicionado para quizás en un futuro no muy lejano dar el salto.