Condenado a seis años de cárcel el exdirector de la Faffe por el uso de dinero público en prostíbulos

Sevilla

La Audiencia de Sevilla condena a seis años de prisión al exdirector de la Faffe, Fernando Villén, por pagar con dinero publico sus gastos en diferentes prostíbulos con tarjetas bancarias de esta extinta fundación de la Junta que se creó para formar a desempleados. También condena a cinco años y tres meses de cárcel a la exdirectora económica-financiera de la entidad, Ana Valls, por los delitos de malversación y falsedad en documento oficial. Estas son las penas que ha impuesto la jueza Mercedes Alaya tras el veredicto de culpabilidad de un jurado que ella presidió. La sentencia se puede recurrir.

Villén, según la sentencia, prevaliéndose de su cargo llevó a cabo de manera continuada una disposición ilícita de fondos públicos para pagar los servicios que solicitaba en diferentes locales de alterne de Sevilla y otras provincias andaluzas. En total gastó 32.566 euros entre 2004 y 2010. De ese dinero solo ha devuelto los gastos de dos días en el club Don Angelo de Sevilla. De ahí que la indemnización que tendrá que pagar a la Junta sea solo de 24. 129 euros.

Dice la sentencia que tanto él como la directora económica de la Fundación simularon las devoluciones de los gastos en metálico en la caja central, donde no se ha encontrado documentación justificativa de las devoluciones. Mediante este procedimiento los acusados, señala el fallo, eran conocedores de que se podían eludir los controles al final de cada ejercicio económico

La sentencia sostiene que Villén tenía una afición descontrolada por este tipo de establecimientos. El jurado por unanimidad declaró culpable a Villén en el veredicto que dio a conocer el pasado mes de junio por "una continuada disposición ilícita de fondos" públicos para gastos en prostíbulos y por "falsear" la contabilidad de la entidad, "con la colaboración" de Valls, para "simular las devoluciones" del dinero público empleado.

Villén reconoció estos gastos

En la primera jornada del juicio, Fernando Villén reconoció que había usado su tarjeta de empresa de la Faffe para pagar gastos en prostíbulos, 32.566 euros más al detalle. No obstante, Villén defendía que siempre fue consciente de que debía "devolver" a la Faffe el dinero de todos aquellos usos "indebidos" de la tarjeta para gastos "injustificables" en prostíbulos, extremo que según sus palabras hizo "siempre", con la "reposición del gasto" de la tarjeta aportando su propio dinero para ello, según sus palabras.

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La exdirectora financiera de la entidad, Ana Valls, manifestaba de su lado que antes de que estas prácticas trascendiesen a los medios de comunicación, no sabía "nada" de tales gastos, asegurando que sintió "un gran bochorno" al igual que el resto de la plantilla de la Faffe.

Pero el jurado popular, tras detallar cada una de las "operativas" de gasto abordadas, precisando que 25.277 euros de los mencionados 32.566 euros de la Faffe objeto del juicio fueron gastados en el club Don Ángelo de Sevilla capital, ha declarado probado, por unanimidad, que Villén gastó dicha cuantía de los fondos de la entidad pública que dirigía "para su lucro personal, sin que haya devuelto" el dinero, pues "no consta" la devolución desde sus cuentas bancarias ni "documentación justificativa que acredite" las devoluciones aludidas por Villén.

También declaró probado, por unanimidad, que Fernando Villén y Ana Valls, "de común acuerdo", "simularon supuestas devoluciones" del dinero gastado por el primero en los citados prostíbulos, considerando probado por unanimidad que Villén contó con la "aquiescencia" de Valls.