Sobre sumar, multiplicar, dividir y restar

Jerez de la Frontera

Tras más de 30 años en la dirección de proyectos, una siempre acaba reconociendo las que denomino "las personalidades matemáticas".

Están en todas partes. A veces de una en una, a veces juntas.

Están en las reuniones de equipo, en las empresas y en las comunidades de vecinos. Siempre

aparecen.

Están las que suman. Suman valor, energía, trabajo y se suben al carro. O si no pueden subirse,

ayudan a empujarlo. Sumar.

Otras son las multiplicadoras. Son capaces de multiplicar el impacto de un proyecto con una simple idea, y convertir el carro en un tren de alta velocidad. Adoro a las personas multiplicadoras.

Otras personas dividen. Porque creen fielmente en ese dicho de "divide y vencerás". Porque ni quieren empujar, ni saben multiplicar y necesitan trabajar en pequeños grupos para intentar controlar al resto. Porque no pueden con todas a la vez.

Y finalmente están los que restan. Los que tienen esa capacidad innata de entrar en un equipo, en un proyecto, o por ejemplo, en una organización, y en lugar de contribuir a mejorarla, la empeoran, la frenan y la desprestigian. Los que restan.

Estas personalidades matemáticas se replican en el mundo, y obviamente, también en Jerez.

¿Y tú? ¿Dónde te sitúas?