El Ayuntamiento retirará el Ficus de la Encarnación
La decisión se basa en la evidencia de la disminución del nivel de tolerancia al riesgo, así como en la degradación interna del árbol, la migración del sistema radical y la presencia de hongos xilófagos


Sevilla
El pasado 17 de septiembre, una rama del ficus de la Plaza de la Encarnación se desprendió debido al mal estado provocado por un hongo, según confirmó el propio Ayuntamiento. Esto ha provocado que se intensifiquen los estudios sobre el estado del ejemplar, que han concluido con la decisión de retirar el ficus definitivamente.
Afortunadamente, el incidente ocurrió temprano en la mañana, evitando daños personales, ya que los veladores de la zona se encontraban recogidos aún. Sin embargo, la caída de la rama resultó en la pérdida del 30% del volumen de copa del árbol, desprendiendo uno de sus ejes primarios.
Tras rigurosos estudios de evaluación de riesgo, se ha revelado que el riesgo de fractura de ramas y vuelco completo es alto, debido a la extensa degradación de la madera y a la migración del sistema radical hacia cotas más elevadas. Además, la presencia de hongos xilófagos y objetos externos invasivos ha agravado la situación.
El Informe Técnico de Evaluación de Riesgo de Arbolado, emitido el 26 de septiembre de 2023, ha concluido que la estructura interna del árbol está degradada en aproximadamente un 50%. Este hallazgo, junto con los antecedentes de caídas de ramas, ha llevado a la reducción significativa del nivel de tolerancia. Como resultado, se ha tomado la decisión de eliminar el ejemplar y reorganizar los parterres de la plaza, nivelando las cotas y renovando el suelo.
La decisión se basa en la evidencia de la disminución del nivel de tolerancia al riesgo, así como en la degradación interna del árbol, la migración del sistema radical y la presencia de hongos xilófagos. La conservación de la estructura de ejes primarios podría requerir una inversión significativa de recursos económicos y humanos, sin garantías de supervivencia a largo plazo. Además, la incertidumbre generada por el último incidente ha comprometido la estabilidad de al menos dos ejes principales del árbol.




