El camarín de la iglesia de los Dolores de Baza se abre al público
Se podrá visitar todos los primeros viernes de cada mes, después de la misa de las siete de la tarde
Mabel Martínez, hermana mayor Los Dolores de Baza
Baza
El camarín de la iglesia de los Dolores de Baza se abrirá todos los primeros viernes de cada mes para permitir las visitas al público. Quien quiera conocer esta joya del patrimonio barroco andaluz podrá entrar al camarín después de la misa de las siete de la tarde.
Recientemente, se celebró el primer cabildo de la Cofradía del Silencio para empezar a preparar la Semana Santa de 2024. En este encuentro se adoptó el acuerdo de abrir al público el camarín de la Virgen de los Dolores. Desde la Parroquia del Sagrario y la Cofradía del Silencio de Baza se ha adoptado la decisión de posibilitar e impulsar el conocimiento de este espacio, lo que será posible a partir del viernes 3 de noviembre.
Comunicado de la cofradía de los Dolores
La hermandad bastetana de Los Dolores ha publicado un comunicado en el que explica que quiere "dar a conocer esta joya artística y arquitectónica que la ciudadanía no ha tenido muchas posibilidades de conocer, por lo que ahora se pretende romper esa tendencia y ponerlo al alcance de todas personas que deseen acceder al camarín para poder verlo.
El camarín presenta algunos desperfectos que nos harán trabajar a todos para posibilitar su pronta restauración, pero también es cierto que pasan los años y continúa cerrado el acceso al mismo, lo que ha llevado a tomar la decisión de mostrarlo tal cual se encuentra y no dejar que siga pasando el tiempo".
Origen barroco
El antiguo Oratorio de San Felipe Neri, del que ya impresiona su portada, fue construido en 1702, adosado al antiguo Palacio Episcopal, tiene planta de cruz latina con tres naves, destacando al inicio de la nave central su camarín barroco, tallado en madera y con una impresionante bóveda realizada en yeserías, con incrustaciones diversas, que forman un conjunto que es uno de los máximos exponentes de los desarrollos decorativos de la época en nuestra provincia y comparable al camarín de la Virgen del Rosario de Granada, según estimaciones recientes de expertos de la Universidad de Granada.