Sociedad

José Luis Sebastián Fernández, presidente de Jarquil, Ingeniero del Año 2023 en Andalucía

La distinción reconoce su desempeño brillante en 45 años de carrera profesional y una gestión ejemplar al frente de un equipo de 500 trabajadores y el acto de entrega tendrá lugar el 19 de diciembre en Sevilla

Sevilla

La Demarcación de Andalucía, Ceuta y Melilla del CICCP reconoce con el premio Ingeniero del Año 2023, al almeriense José Luis Sebastián Fernández, presidente y fundador de Jarquil (1986), una constructora con presencia actualmente en España y Marruecos. Esta distinción, que se entregará el 19 de diciembre en Sevilla, se decidió por unanimidad en la Junta Rectora de la Demarcación por sus indudables méritos. Un ingeniero “fiel a su palabra”, que siempre cumple con sus compromisos, garante de una gestión ejemplar al frente de un equipo humano de más de 500 trabajadores -donde los ingenieros de caminos forman un “pilar fundamental”- y que constituyen el máximo valor de Jarquil, una empresa que este año ha marcado un hito histórico, superando los 200 millones en facturación.

De hecho, admite, “que los grandes hitos sólo se consiguen mediante el trabajo en equipo, y en ese sentido es vital saber rodearse de personas de valía con las que compartir no solo los éxitos, sino también los reveses, así como los esfuerzos a partir de los que superarlos”. Sebastián Fernández se muestra agradecido por “los grandes profesionales que más me han aportado a lo largo de mi andadura empresarial” para lograr este reconocimiento y al Colegio por su concesión tras un bagaje de 45 años de carrera de desempeño brillante.

Consultado sobre la situación actual de la Construcción en Andalucía, el Ingeniero del Año 2023 considera que “sigue inmersa, de forma casi permanente desde finales de 2008, en la escasez de capacidad instalada (industriales, empresas especializadas, mano de obra cualificada)”, y está “muy afectada por la incontrolada subida de costes de los materiales de construcción de los últimos años”. Este último punto, subraya, está tendiendo a estabilizarse en 2023. Al margen de ello, y en el lado positivo, explica que “nos encontramos en un momento de cambios, fruto de las nuevas tecnologías, la digitalización y las formas de construir, tales como la construcción industrializada”. Aquí destaca la permanente búsqueda de la máxima calidad por la vía de la innovación, por la que Jarquil lleva tiempo apostando, “y que no solo es más sostenible y segura, sino que puede también contribuir a contrarrestar esos retos relativos a la escasez de medios”.

Sebastián Fernández hace hincapié en la valía y capacidad de los Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos en los campos en los que intervienen, tanto en el desempeño tecnológico como de alta dirección, “profesionales versátiles con una amplia capacidad de trabajo”.

Sobre José Luis Sebastián

Natural de Tahal (Almería, 1954), José Luis Sebastián Fernández egresó como Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos en el año 1977 por la Universidad de Madrid. Tras obtener el título, comenzó su andadura profesional en la empresa de prefabricados Juan Cirera Arcos, donde ejerció como Director Técnico, mismo cargo que desempeñó en Áridos Humbrión.

Como profesional libre colaboró en multitud de proyectos a principios de los ochenta, siendo socio fundador en 1982 de su primera empresa, Ingeniería y Centro de Cálculo, a la que siguió la constructora Jarquil, en 1986, el laboratorio ICC Control de Calidad en 1990, la empresa de prefabricados Jarpre en 1992, la consultora de recursos humanos Ares en 1999, la gestora de inversiones inmobiliarias Dimensur en 2004, o la empresa de jardinería Jarquil Verde, en 2007, además de numerosas sociedades inmobiliarias. Su buen hacer en la dirección de todas ellas permitió un crecimiento continuado a lo largo de los años, habiendo desarrollado su actividad en la práctica totalidad del territorio nacional. En cuanto a las señas de identidad de su gestión, destaca el cumplimiento escrupuloso de cuantos compromisos suscribe, pero por encima de todo y en palabras suyas, “lo único importante de una organización son las personas que la integran”, insiste.