“Se puede asegurar un pene; lo difícil es demostrar que es una herramienta de trabajo”

Pues si. Se puede hacer un seguro de las partes de tu cuerpo que contribuyen al placer sexual o que se implican a la hora de tener un orgasmo. Pero ¿qué valor tendría, qué precio se le pone?

Este capítulo de 'Seres Sexuales' cuenta con la participación del mediador de seguros Fran Galán quien nos contó que “todo se puede peritar en base a lo que se pueda ganar con la parte del cuerpo con la que se esté trabajando en un momento determinado” Esencialmente todos los seguros vienen a ser iguales y parte del cálculo cuantitativo de lo que se haya ganado en años anteriores en el uso del órgano sexual. “No debemos olvidar que un siniestro de seguro es algo súbito, imprevisto y ajeno a la persona que lo asegura y eso puede ser un coche, una casa o un pene”.

Sobre este asunto explicó Galán que las compañías de seguro pueden asegurar partes del cuerpo que no sean habituales como objeto de contrato, por ejemplo, los órganos sexuales pertenecen al capítulo de “cosas” muy específicas que además están sujetas contractualmente a condiciones extremas. “Si tomamos en cuenta la voz -nos dijo- las cláusulas del seguro recogen hasta el tanto por ciento requerido de humedad para que pueda hacer efectivo e incluso prohibir cantar cuando llueve, las condiciones tratándose de sexo son duras. Cierto es que todavía no se ha demostrado que una persona que haya asegurado una parte de su cuerpo susceptible de participar en un acto sexual haya cobrado nunca.

Los colaboradores de este podcast son:

• El urólogo Juan Manuel Poyato Galán, doctor en Medicina y Cirugía, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria Urología, Andrología y Medicina Sexual
• Vanesa García Millan, licenciada en Psicología, máster en terapia sexual y de pareja y co-directora de “Mind Psicologos
• Ayla Deseare, orientadora sexual, sexcoach, especializada en parejas, directora de “Deseare"
• Maite Cadaval, actriz, presentadora quien a pie de calle recopila testimonio de oyentes.