Nieto denuncia que más de 6.000 campogibraltareños están en lista de espera para operarse

Izquierda Unida ha calificado de lamentable el incremento de las listas de espera en los centros hospitalarios del Campo de Gibraltar, que sitúa en 4115 los pacientes pendientes de operación en el Hospital Universitario Punta Europa y en 1753 en el hospital de La Línea.

Estos datos, suponen un importantísimo incremento de las listas de espera respecto al año 22, que resulta especialmente relevan en el centro hospitalario algecireño, que ha triplicado el número de usuarios pendientes de operación, pasando de 1845 en el pasado año a los mencionados 4115 en el presente; mientras en el hospital linense el incremento supera el 30%.

“Con propaganda no se puede esconder la crítica situación de la sanidad pública en Andalucía, tal y como pretende el PP; y mucho menos en una comarca como el Campo de Gibraltar que se ha visto afectada sobremanera por el incremento de las listas de espera quirúrgicas del SAS”, ha sostenido la diputada de IU y portavoz parlamentaria de Por Andalucía, Inma Nieto.

La diputada de izquierdas considera que estos datos son la consagración del fracaso del modelo de gestión del Moreno Bonilla y su apuesta por la privatización; “dejando claro que los incrementos de recursos presupuestarios están centrados en la privada y no repercuten en los usuarios de la sanidad pública”.

Desde IU ponen el acento igualmente en la existencia de más de dos mil pacientes en el Campo de Gibraltar que han superado el plazo máximo que la legislación les otorga como derecho para ser atendidos.

En cuanto a los días de demora media para que los pacientes sean atendidos en sus intervenciones quirúrgicas resulta demoledor el dato del hospital de la Línea que se ha casi triplicado en el último año, mientras el retraso en el centro hospitalario algecireños se incrementa en un 30%.

Estos datos publicados por el SAS vienen igualmente a poner de manifiesto porque el gobierno de Andalucía ha escamoteado la publicación de los mismos hasta después de los ciclos electorales, en un nuevo ejercicio inaceptable de falta de transparencia política.