¿Hemos hecho puente o puenting?
El subdirector de Diario de Sevilla, Carlos Navarro Antolín, reflexiona sobre los excesos sufridos estos días atrás del puente festivo en grandes capitales como Sevilla
¿Hemos hecho puente o puenting?
Sevilla
Es curioso. La sociedad del confort ha laminado en buena medida la cultura del esfuerzo, el sacrificio y el mérito que nos han legado los mayores. No sólo no ha terminado con ciertos valores sino que fomenta hábitos y usos que entran en colisión con la comodidad, la buena calidad de vida y la recompensa inmediata.
La inauguración del encendido de las luces de Navidad ya supuso una actividad de riesgo tal que la Policía tuvo que cortar la música y aforar calles en el entorno del Ayuntamiento. El puente festivo ha confirmado que corremos el riesgo de un exceso de público en los días de fiesta. El puente ha sido una suerte de ‘puenting’ en muchos momentos con concentraciones de miles de personas deambulantes sin destino, sin criterio y sin negocios que pudieran responder a tanta demanda. La Navidad es un fenómeno de masas en las grandes capitales desde hace unos diez años. Necesitamos salir como sea y contarlo como sea. Salir a cualquier precio, estar donde parece que están todos, hacer lo que parece que hacen todos. Buscamos los destellos de las luces eléctricas en la tierra de la luz natural. El motivo es lo de menos. Cubrir la necesidad es lo de más. Una buena prueba es que ya es habitual que se haga cola de espera una hora antes de la apertura de un bar. ¿Cuándo se ha visto eso?
No debe bajar la guardia el gobierno de la ciudad porque esto no ha hecho más que empezar. Al fenómeno de masas de la Navidad le seguirá uno que se llama Semana Santa. Todas las precauciones serán pocas.