Miguel Ángel Fuertes en su último Carnaval de Cádiz: "Me sigo emocionando igual que el primer día"

Cádiz

Más de 45 años lleva Miguel Ángel Fuertes siendo el regidor del Gran Teatro Falla. Toda una vida tras bambalinas garantizando no solo que las funciones salgan adelante, sino regalando a tantos y tantos componentes de agrupaciones esos icónicos gestos cómplices y esos abrazos tranquilizadores del 'Salmendro', como le conocen en el teatro.

Se hizo regidor porque lo vivió con su padre. Así ha rozado el medio siglo coordinando a un equipo de personas que son fundamentales para el Concurso Oficial de Agrupaciones del Carnaval de Cádiz.

A pocos días de jubilarse, Fuertes reconoce que está teniendo "un nudo en la garganta que no está siendo ni normal", disfrutando de multitud de homenajes y coplas dedicadas desde las tablas del teatro.

Minutos después de que finalizase la final juvenil y en los instantes previos al fallo del jurado, Fuertes atendió a Radio Cádiz mientras oteaba, con la misma ilusión del primer día, el patio de butacas y los palcos vacíos del que ya es su teatro.

"Un regidor tiene que tener mucha templanza, ser tranquilo, no demostrar tus nervios, mirar a una persona y ver cómo está. Ellos vienen con muchos sentimientos y a eso hay que ayudarles. Es cuestión de cariño", dice este gaditano que roza los dos metros y que abraza con la misma sinceridad a un veterano comparsista que a un pequeño chirigotero de la cantera. De hecho, ha relatado que antes de que empezase a cantar una agrupación juvenil "he visto a un niño que estaba rezando, me acerqué, le di un beso y resopló de alivio".

Él mismo bromea cuando es preguntado por lo que hará todos los días cuando se jubile: “mi mujer me ha dicho que tengo que estudiar Árabe. Árabe a por papas, Árabe a la plaza…” ha espetado entre carcajadas.

De todas las historias que atesora Miguel Ángel Fuertes, ha contado una de las más recientes, cuando encontró a un niño con el necesario espíritu pícaro de los grandes autores de carnaval.

"Casi todos los autores que están aquí eran los que daban más por culo cuando eran pequeños y siempre se colaban. 'El Tomate', por ejemplo, no era normal, era horroroso; siempre se colaba porque antes no había tantas reglas como ahora. Este año, al salir fuera para buscar al jefe de sala, me encontré a un niño que me dijo “Miguel Ángel ¿tú me vas a colar?” Yo le dije que no podía pero cuando entré para la función lo vi dentro porque se coló con una agrupación y dije: este niño será un gran autor, por tiene la picaresca que hace falta”.

Fuertes ha reclamado más apoyo a la cantera por parte de “los grandes del carnaval, porque si no, vamos a tener más gente de fuera que de dentro. Tenemos un diamante muy grande y se lo están llevando poquito a poco”, ha lamentado.