La comunidad educativa del Colegio Jesús María se echa a la calle para que el tráfico no circule por la Alameda

Jaén

La comunidad educativa del Colegio Jesús María se ha echado este jueves a la calle para protestar por el peligro que supone que el tráfico de camiones y vehículos que acceden estos días a las obras del nuevo centro de salud que se está construyendo en el Hípico acceda por la Alameda, a metros escasos de las puertas por las que cada día alrededor de 300 niños y niñas entran y salen del colegio.

Con gritos como la 'Alameda no se toca', principalmente madres y padres del centro, acompañados también de jiennenses que han querido sumarse a la protesta, han pedido a la Junta de Andalucía que recapacite y busque alternativas para que ahora accedan los camiones y en su futuro el tráfico rodado que llegue al centro de salud.

El alumnado también ha ido colocando dibujos reivindicativos en la valla que estos días se ha colocado en la zona para proteger el tráfico rodado en los que piden evitar que los camiones pasen por esa zona para acceder a las obras del nuevo centro de salud.

En una nota de prensa enviada también a los medios, la representación de las madres y padres dentro del consejo escolar del CEIP Jesús María, ha querido de la misma manera transmitir su "indignación y preocupación" ante la imposición de la Delegación de Salud de abrir al tráfico el parque de la Alameda, pasando por las puertas de entrada del centro educativo, para la entrada al nuevo centro de salud.

La indignación, dicen, llega por la "tajante negativa a plantear otras opciones" que no sean las de abrir al tráfico el parque más antiguo de la ciudad, que según la comunidad educativa "cuenta con una figura de protección como bien cultural y por el que transitan a diario cientos de personas de todas las edades".

La preocupación, del mismo modo, llega a las familias porque tras el vallado "repentino", asegura, "se ha intensificado el paso de vehículos pesados para los trabajos de la obra. El paso de estos vehículos llega a coincidir en ocasiones con la entrada y salida de nuestras hijas e hijos al colegio, exponiéndolos a un grave peligro, sin tan siquiera contar con presencia de policía local para regular el paso y dotarlo de unas mínimas e indispensables condiciones de seguridad", dicen.

Por esos motivos, las madres y padres del centro, comenzarán una serie de acciones que desembocarán en próximas movilizaciones en contra de una decisión que consideran totalmente "errónea".