Curro Sánchez: "Algeciras, para mi padre, ha significado su identidad, donde se forma su personalidad y su sensibilidad artística"
En el décimo aniversario de su muerte miramos a Paco de Lucía con los ojos de su hijo Curro
Curro Sánchez: "Algeciras, para mi padre, ha significado su identidad, donde se forma su personalidad y su sensibilidad artística".
Algeciras
En el décimo aniversario del fallecimiento de Paco de Lucía y tras los actos de homenaje celebrados en la ciudad de Nueva York, en Radio Algeciras hemos querido conversar con Curro Sánchez, el hijo de Paco de lucía, para conocer, a través de la mirada del hijo, el tremendo legado del artista.
Curro Sánchez anda de aeropuertos y viajes, es una semana de muchos compromisos y de muchos recuerdos y durante ese trasiego Curro ha respondido a nuestras preguntas sobre la ausencia de Paco en estos diez años. "Uno se acostumbra, pero por ello no deja de echarle mucho de menos, sobre todo en una fecha tan señalada. Y también te das cuenta, por otro lado de lo rápido que pasa el tiempo".
Esta semana se le ha rendido un homenaje en Nueva York una ciudad con la que mantuvo una relación muy especial, "mi padre nos comentaba siempre lo que le impresionó con 13 años la ciudad de Chicago y posteriormente su visita a Nueva York, nunca había visto algo así, ese romance con Nueva York el resto de su vida. Tenía muchos amigos allí, el maestro Sabicas, Mario Escudero... Alguno de los momentos más importantes de su carrera se fueron creando en esa ciudad. Ahí es donde Sabicas le recomienda que comience a hacer sus propias creaciones; y ahí es donde toca por primera vez en uno de los grandes espacios de la música, reservados a otros géneros, como es el caso del Carnegie Hall. Aquello marcó su futuro para siempre".
Curro recuerda la relación con sui padre, tuvo sus momentos de niño, una relación muy cercana, muy afectiva, muy bonita, llena de recuerdos muy entrañables y de muchas risas, mucho humor, siempre tenía una ocurrencia que hacía que nos riésemos mucho. Ya en la adolescencia, más distancia, la separación de mi padre con mi madre, y todo el distanciamiento que suponía estar todo el día girando, o encerrado en un estudio componiendo. Luego ya a los 25, 26 años, hasta los 29, que es cuando él fallece, volví a recuperar la relación, y de nuevo volví a sentir ese vínculo tan fuerte que sentía, cuando era un niño, con él. Volví a sentir esa relación tan bonita de padre e hijo".
Curro ha recordado la última vez que estuvo con él, era septiembre o agosto de 2013 en Mallorca, justo antes de su gira latinoamericana, estuvimos revisando el documental La búsqueda, él puso mucho hincapié en las músicas que era lo que más le preocupaba que saliese bien en el documental. Vio los primeros 45 minutos y luego nos comimos un pescado al horno en una terracita que tenía en su casa de Mallorca, con mis hermanos Antonia y Diego y con Gabriela. Cuando terminamos de comer nos quedamos mi padre y yo charlando y bebiéndonos una botella de vino blanco que nos habíamos abierto, hasta las siete de la tarde. Fue muy afectivo y muy cariñoso. Me llamó a una esquina y me dio un fajo de billetes de cincuenta dólares y me dijo para tus gastos, hijo y me dio un abrazo muy cariñoso, me felicitó por el documental. Y esa fue la última vez que nos vimos".
Curro cuenta que su padre, Paco de Lucía, no era dado a recibir homenajes, "era una persona muy tímida y no le gustaba el autobombo, la celebración de la figura, un acto que el veía como un punto al ergo del artista, siempre que podía rehuía de este tipo de celebraciones. Pero sí que es cierto que el Príncipe de Asturias le hizo mucha ilusión y se sintió muy reconocido y sobre todo sintió que por fin se reconocía al flamenco. Eran contadas las ocasiones en las que él se sentía a gusto con un homenaje o con unos premios".
Haber colocado en su sitio al flamenco a los flamencos fue también importante para Paco. "Él pensaba que podía quedarse satisfecho por la contribución que había hecho al flamenco porque así nos lo dejó saber en entrevistas para el documental y en conversaciones con los familiares. Creo que él tenía la percepción de que, junto a otra generación de flamencos que eran unos auténticos, genios habían dejado las herramientas, los elementos necesarios para darle un recorrido al flamenco y hacerlo avanzar".
La universidad y el flamenco es para Curro Sánchez "otro hito que era mezclar los centros académicos de formaciones superiores con la cultura, la filosofía y la profundidad del flamenco de la mano de Paco de Lucía, que por fin los dos mundos confluyesen y se enriqueciesen, y eso fue gracias a mi padre. La Universidad de Cádiz le nombró Doctor Honoris Causa".
Curro sigue descubriéndonos a Paco de Lucía cuando hablamos de lo que suponía para él ser reconocido como el mejor del mundo, "era una fuente presión y de autoexigencia que le dejaba en una situación de tormento creativo casi constante y de responsabilidad por no meter la pata, por no alejarse demasiado del camino. Yo creo que ese reconocimiento que a muchos les puede generar una sensación de fuerza y de influencia, en el caso de mi padre era fuente de presión y de inseguridad tremenda".
Le preguntamos por Algeciras. "Algeciras para mi padre ha significado su identidad, ahí es donde ser forma su personalidad, su forma de ser, su sensibilidad artística, su sentido del humor, su sentido de la familia y de la identidad andaluza". Precisamente se espera que en breve Algeciras cuente con el Centro de Interpretación Paco de Lucía. "Esperamos que este Centro no sean solo espacios que honren la Memoria de Paco de Lucía, sino también un espacio de intercambio cultural, un foro social donde la gente pueda intercambiar ideas, música y conocimientos. Estamos muy orgullosos y deseando que llegue el día de la inauguración".
Juan Manuel Dicenta
En la radio desde el año 1981, comenzó en los...