La ampliación de El Cabril recibe la declaración de impacto ambiental
El inicio de obras queda supeditado a la autorización de construcción del MITECO y el dictamen favorable del Consejo de Seguridad Nuclear
Córdoba
La Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) ha emitido la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto para la construcción de la plataforma sureste para el almacenamiento definitivo de residuos de baja y media actividad en el Centro de Almacenamiento de El Cabril, según publica hoy el Boletín Oficial del Estado. Es un paso clave para la ampliación del almacén nuclear situado en Hornachuelos.
Dice el documento que la ampliación no afectaría de forma notoria a masas de agua ni arbóreas. Y que la tierra en la que se actuará es "especialmente pobre". Tampoco se recogen problemas de consideración respecto al impacto sobre la Salud, aludiendo a informes del ministerio de Sanidad. Eso sí, el constructor estará obligado a establecer protocolos antivertidos, precauciones a la hora de conservar la fauna y límites de contaminación acústica a la hora de ejecutar la obra, entre otros.
En un comunicado, Enresa ha especificado que la Declaración de Impacto Ambiental se ha sometido a un plazo de información pública para asumir posibles alegaciones y, ahora, se da por validado. Por tanto, el inicio de las obras de ampliación, cuya tramitación se inició en el año 2022, queda supeditado a que el Consejo de Seguridad Nuclear emita un dictamen favorable respecto al proyecto, que también requiere de la autorización de construcción por parte del MITECO.
La construcción de la plataforma sureste de El Cabril prevé, en una primera fase, 12 nuevas celdas para residuos de baja y media actividad, y otras 15 celdas en una segunda fase que dotarán a la instalación cordobesa de capacidad suficiente para gestionar la totalidad de residuos de esta tipología según el inventario previsto en el 7º Plan General de Residuos Radioactivos.
Solo en los próximos tres años, tal y como avanzó La SER, El Cabril recibirá casi 2.000 toneladas de residuos radiactivos procedentes del desmantelamiento de la central nuclear Santa María de Garoña (Burgos). El traslado de estos residuos, que se hará por carretera con especiales medidas de seguridad, comenzará a finales de este año.