El estudio definitivo de la cueva de la cantera de la Araña concluye que es necesario "preservarla en su totalidad"

Málaga

Los especialistas de la Universidad de Granada que han estudiado, al detalle, la Cueva de las Estegamitas, tras el informa encargado por la Junta de Andalucía, concluyen que es necesario "preservarla en su totalidad". El informe destaca el "alto valor natural y científico" de la cavidad. Este estudio aún no supone garantizar, al cien por cien, su protección pero "todo se encamina a ello" según confirman a la SER fuentes de la administración regional que recuerdan que a este informe definitivo se deben aún sumar los estudios que están elaborando desde dos consejerías del Ejecutivo autonómico: la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, así como la Consejería de Industria, Energía y Minas.

Según detalla el informe de la Universidad de Granada -al que ha tenido acceso la SER y que consta de 123 páginas-, la cavidad "es de origen hipogénico -debido a la acción de fluidos corrosivos de origen relativamente profundo y quizás también por la mezcla de aguas dulces y saladas marinas-, con un desarrollo fundamentalmente horizontal (19 m de desnivel máximo) y constituida por más de 500 m de conductos ramiformes relativamente voluminosos. En su interior se han identificado 23 formas endokársticas, incluyendo morfologías erosivas, espeleotemas y depósitos detríticos. La existencia de depósitos de guano y marcas de úrsidos indican que la cavidad estuvo abierta al exterior en el pasado, antes de su descubrimiento fortuito en 2021. La CCA presenta una elevada geodiversidad asociada principalmente a formas y procesos geomorfológicos y mineralógicos. Entre los elementos de mayor interés, destacan los discos, escudos o paletas (llamados en algunos ámbitos estegamitas, para el caso de los discos verticales), que constituyen morfologías y depósitos de carbonato cálcico poco habituales a escala mundial, y que son relativamente abundantes en la cueva de estudio, donde todas sus morfologías y fases de crecimiento parecen estar bien representadas".

El estudio desvela además que "las condiciones de exposición son adecuadas para poder observar y estudiar este tipo de fenómeno geológico. Todo ello permite considerar esta cueva como patrimonio geológico asociado a elevado valor natural y científico, que forma parte de los Sistemas kársticos en carbonatos y 79 evaporitas de la Península Ibérica y Baleares, declarados contextos geológicos de España de relevancia internacional por la Ley 42/2007. Los resultados de los análisis mineralógicos y geoquímicos de los depósitos muestreados en la cavidad complementan los obtenidos por otros autores, aunque también, a veces, entran en discordancia con ellos. Especialmente interesante es el hallazgo de alunita en algunas de las muestras, lo cual podría ser indicativo de una espeleogénesis hipogénica por la presencia en el pasado de ácido sulfúrico, coherente con algunas morfologías de corrosión que afectan a las paredes de la cavidad".

El detallada análisis de los expertos añade que "la poca antigüedad que suministra la única datación que hemos realizado (5.150 +/- 30 BP) indica que los discos son formas muy recientes y que están en fase de crecimiento. El muestreo para análisis isotópico de uno de ellos aporta una información paleoclimática de gran interés. El debate sobre el orígen y la evolución de la cavidad, y sus espeleotemas más emblemáticos, refuerza el interés científico de la misma, y abre una puerta a posibles estudios futuros que aclaren los interrogantes actuales sobre el origen de este tipo de cavidades. Todo ello, evidentemente, siempre que se conserve la misma".

Los especialista concluye que "por todo ello, y especialmente por la presencia en la cueva de elementos geológicos singulares a escala internacional muy bien representados, como son los discos verticales -estegamitas según otros autores-, la valoración patrimonial del conjunto subterráneo de la cueva indica que esta presenta desde el punto de vista geológico un alto valor natural y científico, por lo que consideramos que la cavidad debería ser preservada en su totalidad. Así mismo, la cueva debe ser incluida en el Inventario Andaluz de Georrecursos de la Junta de Andalucía y debe ser salvaguardada con una figura legal de protección que restrinja los usos y actividades autorizables en el pequeño entorno de la cueva (unos 25.000 m2 de extensión), tanto en superficie como subterráneamente. Por ello, al ser la cueva un elemento puntual y de gran valor, la figura de protección ideal debe corresponder con la categoría 3 establecida por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), entre los que se incluyen la figura de Monumento Natural".