Mujer cordobesa
Firma de Opinión de Marisa Vadillo, profesora de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla
Mujer cordobesa. Marisa Vadillo, profesora de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla
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Yo no sé qué pensarán ustedes, pero para mí todos los años, sobre todo por estas fechas de finales de abril y comienzos de nuestro mes de mayo me asaltan unas dudas importantes sobre qué será eso de la ‘mujer cordobesa’. Siempre me quedo como un poco huérfana cuando lo escucho porque me hace sentir como una intrusa.
Estas dudas me surgen, principalmente, debido a que siempre lo asocian a la imagen de una mujer joven y bella: las feas que vayan emigrando de la ciudad… nos queda claro. También las bellezas de más de treinta años sobran, por lo visto.
La ‘mujer cordobesa’ parece que no es una señora simpática que te vende la fruta en tu barrio, ni una política que haya sido vicepresidenta del gobierno, ni otra que sea presidenta del IMDEEC, ni la que te atiende como médica en una consulta de atención primaria, o la que es una concejala de izquierdas, ni una joven investigadora, ni una madre que lleva a su hijo al parque por las tardes, ni otra que trabaje como cajera en un supermercado… Por supuesto, tampoco las amigas viudas que toman su cafelito reencontrándose cada mañana, ni una joven universitaria matándose a estudiar.
No, el estereotipo de la mujer cordobesa responde a un retrato oficial de una joven que lleva teniendo el mismo aspecto irreal desde el siglo XIX.
Así que no sé ustedes… pero lo mismo tenemos que hacer las maletas más de una. Qué le vamos a hacer.
Marisa Vadillo
Artista y profesora de la Universidad de Sevilla.
