Manuel Díaz "El Cordobés" abre oficialmente el Mayo Festivo
El torero ofreció un pregón lleno de recuerdos y continuas referencias a Córdoba y sus padres
Córdoba
En Córdoba ya es mayo. Aunque oficialmente quedan unos días para que el calendario dé la razón a esa afirmación, lo cierto es que el pregón del Mayo Festivo abre de manera oficial un mes que como aseguró anoche el pregonero de este año, debería llamarse Córdoba.
Manuel Díaz "El Cordobés" fue el encargado este año de pregonar las fiestas de Córdoba, una ciudad que no le vio nacer, pero donde se crió y se formó. "Córdoba me lo ha dado todo", declaró Díaz en un emotivo pregón que sirvió en muchos momentos para homenajear a su madre y a su padre, Manuel Benítez, presente en el Teatro Góngora. "Me piden que pregone el Mayo Festivo. Éste es el toro más difícil que he tenido que lidiar. Yo soy quien soy gracias a Córdoba aunque es cierto que no nací aquí. No se puede ser perfecto. Aquí me formé como torero y corrí como un chiquillo por sus calles. Aquí no vi la luz pero me acogiste como un hijo, me mimaste y alguna vez que regañaste como a un hijo. Aquí pisé el albero de Los Califas y aunque era un chavalillo, la gente me comparaba con el más famoso de los toreros, el más grande del mundo entero. Para vosotros, vuestro héroe. Para mí, solamente mi padre", afirmó Díaz, quien aseguró "¿qué digo yo de mi Córdoba? De sus patios, de sus cruces, de su feria, de sus romerías... La ciudad que por mayo abruma al mundo. No puedo querer más a Córdoba. Si me llamo Manuel Díaz y me apodo El Cordobés", comentó a lo largo del pregón.
Fue una lectura emotiva, plagada de improvisaciones y con continuas referencias a sus orígenes humildes y la relación con su padre, que por fin se hizo realidad el 14 de febrero del año pasado, cuando ambos toreros se fundieron en un abrazo.
La nota musical y flamenca de la noche vino de la mano de la cantaora Miriam Montes acompañada a la guitarra por el Niño Seve.
Una noche para el recuerdo que abre oficialmente Córdoba al mundo entero y como dijo el pregonero "el quinto mes del calendario no debía llamarse mayo, debía llamarse Córdoba. Viva Córdoba".