La verdad y la vida

Esta historia se termina en el 'Carlos Quintanilla' de La Mojonera en un partido más, en un campo donde tanto disfrutan grandes y pequeños esperaba la muerte a un futbolista. Antonio Jesús González Martínez 'El Pesca' perdía allí el conocimiento. Era sábado y el lunes tenía programado el parto su mujer, Cristina. La verdad y la vida. Toda la pena de una familia rota y la alegría de una nueva vida. Tenía 34 años y toda una vida por delante. Un trabajador autónomo lanzando su empresa, un hijo en el mundo y otro por llegar. Una mujer que le esperaba y unos compañeros que lloraban ya en La Mojonera la tragedia que se cernía sobre la alegría del vestuario del Muebles Ventaja. No vale todo en esta vida como dicen los políticos pero ante una tragedia de esta magnitud solo que aferrarse a la verdad y a la vida. Hoy a las 7 Benahadux despide a uno de sus hijos y nacerá otro que van a criar su madre y sus abuelos porque ese hijo del 'Pesca' viene al mundo para mitigar la pena y la rabia. La realidad supera la ficción. Esta historia solo la puede escribir la misma vida. Hoy que estaría trabajando en su empresa loco por ir a casa para estar con Cristina y sus dos hijos, la realidad dice que se marcha al cielo con tantos proyectos por realizar y una hermosa familia que le esperará siempre.

No es una muerte más del día a día. Es la historia de lo que vale una vida. La que se escapó de las manos por un infarto a los médicos y la que viene en un paritorio para encender la luz en una familia a oscuras. Nada volverá a ser lo mismo sin Antonio Jesús y esa familia hoy rota se va a recuperar y volverá a salir el sol pero los corazones de los que le quieren ya le tiene reservado su espacio para la eternidad. Cuánto dolor siento al escribir.

Para el hijo

Hoy se marcha un padre para siempre y llega al mundo un hijo que no lo va a conocer. Su madre, su hermano y los abuelos le hablarán mucho de él pero no será igual. Su nacimiento será la luz que necesita una familia tan joven con toda una vida por delante. Si vida llevará siempre la huella de un padre que se marchó sin conocerlo y esa madre buscará las fuerzas en el hijo. Ha pasado otras veces y la vida ha continuado pero qué fácil se escribe y cuánta pena en esa familia que ha recibido un golpe irreparable. Toda la alegría de un padre seguro que se verá reflejada en los ojos de ese niño que es ahora la alegría por venir para todos. Nada puede mitigar la pena pero ese hijo viene al mundo para ayudar a afrontar una realidad muy dolorosa. Cristina se verá en casa con dos niños y contará con los abuelos en todo momento pero nada ni nadie podrá sustituir a Antonio Jesús. Ese niño ayudará a vivir.

La madre

Cristina trata de asimilar todas las emociones que se agolpan en su corazón con todo el apoyo familiar no le llega para tanto dolor. Nada ni nadie puede entenderla. Todo era felicidad para recibir al segundo de la familia y se ha truncado todo. Ha pasado en un segundo y durará toda la vida. Es muy joven y seguirá luchando pero Antonio Jesús ya no volverá a casa y no se podrán realizar esos proyectos comunes. Formaban una bonita familia donde el trabajo llevaba siempre a una mejoría que los dos buscaban para esos hijos. Arropados los los padres de ambos iban caminando con la ilusión de ser padres y ver crecer el hogar. Mucho cariño está recibiendo esta madre que sabe que al momento de cruzar la puerta de su casa ya buscará a Antonio Jesús y clamará al cielo en demanda de solución a un problema que no lo tiene. Nada ni nadie puede entender la pena de Cristina.

El padre

Si desde el Cielo le dejan todo va a ir bien porque Antonio Jesús era una buena persona. No pasaba inadvertido y era muy querido en su pueblo que le recuerda con infinito cariño. Uno más en la lista de autónomos que quieren salir adelante. Uno más en levantar una familia en los tiempos que corren. Trabajo y fútbol eran su obligación y su pasión. Ahora que ni lo uno  ni lo otro, mientras sus compañeros del Muebles Ventaja le recuerdan con infinito cariño toca pedirle allá donde esté que siga siendo como era y ayude a su mujer y a sus niños a salir adelante. Nadie puede sustituir a un padre y le toca seguir moviendo los hilos de una familia que formó para llenarla de felicidad. Y esta historia se termina como empezó, en el campo 'Carlos Quintanilla' de La Mojonera cuando Antonio Jesús 'El Pesca'. la alegría del vestuario se apagó porque se le paró un corazón muy grande.

La verdad y la vida.