Recuperar el Primero de Mayo

Córdoba

El Primero de Mayo se ha convertido en un festivo más. El día que reivindica la lucha por los derechos de las personas trabajadoras, que costó vidas en tantas huelgas y manifestaciones, sigue perdiendo fuerza entre la inmensa mayoría de la población. Y no será por falta de argumentos.

En Andalucía seguimos teniendo un importante problema de paro. El porcentaje de desempleo juvenil es más que preocupante. Los salarios llevan años sin crecer al ritmo del IPC. Así nos encontramos con familias a las que, a pesar de trabajar, les cuesta llegar a fin de mes. Y son mayoría.

Sueldos que no responden a la realidad de los precios, incluido el de la vivienda. Y cada vez, cargando más gastos añadidos.

Tampoco andan mejor los profesionales de los servicios públicos esenciales. Sanidad y educación. Eterna es la precariedad en nuestro sector estrella, el turismo. Y no nos podemos olvidar de los últimos, mejor dicho últimas, del eslabón del mercado laboral. Las profesiones feminizadas cuyos sueldos ni siquiera aspiran a llegar al salario mínimo interprofesional por su parcialidad y economía sumergida. Limpieza, cuidados, ayuda a domicilio.

Ante este panorama, cabe una pregunta. ¿Por qué cada vez hay menos participación en las manifestaciones del Primero de Mayo? La sociedad no conecta con esta movilización, como sí lo hace con otras como el 8M o el 25 de noviembre. Observo dos variables. Un sistema que promueve el individualismo y la desactivación de una participación social que sí tiene en sus manos cambiar las cosas. Otra, la falta de conexión de los sindicatos de clase con la sociedad.

Pero sirva esta firma para reivindicar la importancia de los sindicatos y del espíritu del Primero de Mayo. Alzar la voz para mejorar nuestra vida como personas trabajadoras. Y perder miedos para propiciar cambios. Trabajo de calidad que nos permita una vida plena y digna.