Drones y punteros láser provocan más de 260 incidentes sobre aviones en Málaga pero apenas se cobran las multas

Málaga

Drones y punteros láser han provocado -según los últimos datos oficiales- más de 260 incidentes sobre aviones en el aeropuerto de Málaga pero apenas se cobran las multas a los autores de estos sucesos según admite la propia Agencia Estatal de Seguridad Aérea. Cada año se registran, de media, en la aeródromo de la Costa del Sol, unos 65 incidentes relacionados por el uso de punteros láser que pueden deslumbrar a los pilotos durante los despegues y aterrizajes lo que se considera tremendamente peligroso al tratarse de las operaciones más arriesgadas de un avión. Las sanciones oscilan entre los 30.000 y 600.000 euros, Según reconoce la Agencia Estatal, en una respuesta del Gobierno en el Senado, y al que ha tenido acceso SER Málaga, es bastante complicado dar con los implicados en los hechos bien porque no hay forma de localizarlos, en algunos casos son extranjeros o los juzgados no lo consideran finalmente un hecho delito a pesar del elevado riesgo que supone para la seguridad aérea.

En seis años se han abierto -solo por el uso indebido de drones cerca de las pistas del Aeropuerto- un total de once expedientes que han dado lugar a sanciones por valor de 45.320 euros. De esa cantidad, el importe cobrado apenas asciende a 5.468 euros. En el caso del uso de punteros láser no hay constancia oficial de expedientes tramitados, y por tanto, no se han planteado multas. Esta práctica supone una infracción del artículo 35.4 de la Ley Orgánica 4/2015, de 30 de marzo, de protección de la seguridad ciudadana. Dicho artículo recoge como infracciones muy graves la proyección de haces de luz, mediante cualquier tipo de dispositivo, sobre los pilotos o conductores de medios de transporte que puedan deslumbrarles o distraer su atención y provocar accidentes.

"El principal problema de los punteros láser y la aviación son los deslumbramientos. Un deslumbramiento en cabina produce una ceguera temporal y en algunas ocasiones daños oculares a los pilotos con pérdida de visión. Las fases más críticas del vuelo son los despegues, aterrizajes, el ascenso inicial y la aproximación final. Una ceguera temporal en una de esas fases es tremendamente peligroso pues en cabina los pilotos están concentrados en que se produzca tanto el aterrizaje como el despegue sin ningún incidente, a la vez que monitorizan los parámetros de vuelos y de navegación instrumental. Cabe recordar que es en estas fases de vuelo donde estadísticamente se han producido más accidentes, por lo que la concentración en cabina es fundamental. La Agencia de la Seguridad Aérea Española, AESA, multa a los autores de deslumbramientos con multas que van desde los 30.000 euros a los 600.000", así lo ha explicado en SER Málaga David Muñoz, delegado en Málaga de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA).

En el verano de 2017, al menos tres pilotos de aviones alertaron de deslumbramientos por láser en las maniobras de aproximación al aeropuerto de Málaga. Los pilotos lo notificaron al aeropuerto, que llevó a cabo el procedimiento habitual comunicando los hechos a la Guardia Civil. En concreto, tras el aviso de los pilotos alertando de los deslumbramientos por láser, la torre de control lo comunicó al aeropuerto, quien ya ha trasladado las denuncias al Instituto Armado. Entonces, los controladores aéreos, a través de la red social X, señalaban que una noche antes ya eran tres los aviones que, llegando a Málaga, se quejaban de deslumbramiento por láser en las maniobra de aproximación.

Pocos días después, un padre y un hijo fueron localizados por apuntar a los aviones en la terminal malagueña desde el balcón de un hotel de Torremolinos, en el Bajondillo. Ambos fueron propuestos para sanción por infracción muy grave a la Ley de Seguridad Ciudadana. Fue un policía nacional fuera de servicio, alojado en el mismo hotel, quien observó cómo dos personas, sobre las 23.00 horas, "apuntaban de modo indiscriminado hacia las aeronaves desde una terraza del establecimiento". El agente, que observó los destellos alertó a la sala del 091, activándose los servicios de emergencia para localizar e identificar a los presuntos responsables. Las pesquisas realizadas condujeron hasta este padre y su hijo -menor de edad- que habrían utilizado sendos punteros para deslumbrar a los pilotos.

Los supuestos responsables de los hechos portaban sendos punteros láser de color verde, con forma de bolígrafos, en el momento de su identificación.