El entorno de San Miguel será sometido a una renovación

El delegado de Obras, Ignacio Cala, anunció una renovación profunda del entorno de la iglesia de San Miguel. En la calle de las Siete Revueltas, Cala explicó que «existen elementos que distorsionan la belleza de este monumento que tenemos en Morón». Se refería a cables que cuelgan, clavados a la iglesia y otros elementos que, desde el ayuntamiento, «con nuestros propios fondos, vamos a hacer una intervención» para soterrar esos cables. También se instalarán nuevas farolas de tipo fernandinas, con luces led.

Destacaba la importancia de San Miguel, uno de los Bienes de Interés Cultural «más importantes, si no es el que más, de Morón y su Campiña», y que necesita esa intervención. Además, se va a mejorar la seguridad de los viandantes, instalando una malla de seguridad. «En determinadas ocasiones, se han desprendido algunos elementos del monumento, poniendo en riesgo el tránsito por la calle Siete Revueltas».

Eso en cuanto a las calles aledañas. La plaza de San Miguel también será sometida a una transformación importante. «Dentro de dos semanas comenzaremos la repavimentación de toda la plaza». Explicó el concejal que el suelo está en un estado deficiente: un suelo de pizarra que, con el paso del tiempo, se ha deteriorado. «Se va a hacer una nueva pavimentación de granito de colores, el clásico de la zona centro de la inmensa mayoría de las ciudades», con lo que se espera un cambio radical.

Pero este cambio trae una vuelta a una estampa clásica de la plaza. «Los vecinos nos han comentado que les gustaría que la plaza de San Miguel volviese a contar con los naranjos típicos que ha tenido históricamente». Estos trabajos, que comenzarán el 10 o el 11 de junio, están financiados dentro del Plan Actúa, y tienen una dotación de 70.000 euros.