Acoso escolar en secundaria y ciberacoso
Acoso escolar en secundaria y ciberacoso
Algeciras
Hablamos con Miguel Ángel Rodríguez Serrano, psicólogo clínico en Unidad de Salud Mental de Algeciras. Orientador escolar en los colegios Huerta de la Cruz y Los Pinos de Algeciras, durante 26 años y hasta enero de este año, que se incorpora a Salud Mental. Y profesor asociado de la UCA, departamento de Psicología.
Sobre cómo afecta el acoso y el ciber acoso en el rendimiento escolar y en el normal desarrollo del adolescente Miguel Ángel incluye un contexto de Humanización, Resiliencia y Prevención, al tiempo que recomienda fomentar la amabilidad, la empatía, la cortesía, el respecto y la educación en las relaciones entre los compañeros, y profesores.
Sobre como se afronta el acoso escolar en esta etapa y el protocolo que se sigue Miguel Ángel expone una serie de pautas. Sensibilidad, firmeza y coordinación: EQUIPO COLEGIO-FAMILIA Acción tutorial: departamentos de orientación, tutores, equipos docentes, directivos, toda la comunidad educativa. Coordinación de bienestar. Intervenir en todos los agentes: víctima, los agresores y los espectadores.
Sobre las pautas de intervención específicas que se pueden realizar desde el profesorado se indica, para el acosado, protegerle y hacerle sentirse segura, darle confianza y que vea interés y esfuerzo por acabar con la situación de acoso y con su sufrimiento Actuar con prudencia, que no destaque ante sus compañeros ni se ponga la situación en riesgo.
Para los agresores, definir muy claramente los comportamientos que no se toleran. Fomentar el desarrollo de su capacidad de empatía, que comprenda cómo se siente su víctima. Y para los espectadores, sociogramas para obtener información de la situación, indicios… Tolerancia cero” del centro con la intimidación y el acoso. Mostrar los recursos para defenderse, pedir ayuda: buzón de sugerencias, tlf. Aclarar la diferencia entre “chivato” y “denunciante solidario” con la víctima de un hecho grave.
Las pautas de intervención con las familias serían, desde su punto de vista las siguientes. Con la víctima, alentarle a hablar: romper el silencio. Hacerle sentirse seguro, valorado, estimado, eliminarle los sentimientos de culpabilidad: no tiene la culpa. Actuar con calma y pedirle que explique lo que le sucede Rebajar la ansiedad, actuar seguros, pero con calma. Demostrarle determinación para atajar la situación. Enseñar al hijo o hija a hacer valer sus derechos.
Los agresores, no culpar a otros por la conducta del hijo o hija. Hablar directamente sobre lo que está pasando y actuar con calma. La actitud de la familia ha de ser firme y decidida de rechazo hacia estos comportamientos. Dejarle bien claro que la familia no tolera ese tipo de conductas.
Y por último los espectadores, desmontar con él la idea de que hablar de malos tratos entre compañeros es delatar, convertirse en “chivato”. Darle opción a que exprese cómo se siente ante esas situaciones, cuál es su reacción y por qué. Que se imagine ponerse en el lugar de la víctima y analice cómo se puede sentir, trabajar la empatía. Ser modelos de comportamiento, implicándose también en situaciones injustas, insolidarias y crueles. Ayudarle y animarle a buscar apoyo entre sus iguales para que no se sienta solo en su lucha contra la injusticia que ve.
Juan Manuel Dicenta
En la radio desde el año 1981, comenzó en los...