Los regantes del Norte de Granada denuncian que los retrasos de la Administración impiden la modernización del regadío

Baza

Los representantes de las comunidades de regantes del Guadiana Menor en las comarcas de Baza y de Huéscar han presentado a sus juntas directivas y asociaciones empresariales, los diseños finales de las obras, ya solo pendientes de editar y presentar a la Administración. Los proyectos contemplan el uso principal de energía renovable, uso de telecontrol con fibra óptica y automatización de la gestión de riego, con las últimas tecnologías. Los regantes contemplan estos proyectos como una oportunidad que no se puede desperdiciar, para el desarrollo integral del territorio, ya que la agricultura de regadío es la única alternativa viable actualmente para luchar contra la despoblación, generar empleo e industria auxiliar agroalimentaria.

Las comarcas de Baza y Huéscar se juegan su futuro con estos proyectos, ya que involucran directamente a regantes de Baza, Caniles, Castilléjar, Castril, Freila y Zújar, con más de 3.000 familias involucradas directamente y casi 10.000 hectáreas en riego, y esperan que la administración ayude definitivamente a parar el importante éxodo rural actual, que otras actividades no han podido detener. En este sentido, preocupan los retrasos administrativos ya que algunas comunidades llevan 36 años sin ver terminados sus expedientes de concesión, y ven con preocupación que se plantean propuestas de trasvases a Almería, y el territorio sin poder consolidar sus regadíos.

Desde las comunidades de regantes, con el apoyo del sector empresarial, se pide a las administraciones que reaccionen y se agilicen al máximo el fin de los trámites administrativos, apostando de verdad por el desarrollo de las dos comarcas, ya que el territorio no está dispuesto a languidecer y convertirse en un desierto demográfico, agrandando la "España Vaciada".