A propósito de la feria

Algeciras

A propósito de la feria que finalizaba el sábado.

El Callejón de la Plaza de Toros de Algeciras es una fiesta. A modo de chascarrillo se suele comentar que si un toro salta al callejón del Coso de Las Palomas, tenemos tragedia. Y eso es seguro porque el callejón está poblado de gente que nada tiene que ver con la celebración del festejo. Bien es verdad que desde el callejón se ve muy bien el festejo, se oye el bufido y el resoplar de la res y se escucha el roce de las astas del toro en la muleta o en los capotes. Se percibe nítido el ambiente que rodea a la celebración estando tan cerca de los matadores y su cuadrilla, sus comentarios, sus gestos, lo que se nos escapa a quienes nos encontramos en los tendidos, como Dios manda.

Pero al parecer existe una casta, un nutrido grupo de personas que, estando al margen de la celebración del festejo, permanecen en el callejón. Y el reglamento taurino es claro al respecto y dice lo que dice:

Artículo 23. Funciones de la Delegación de la Autoridad.

1. Son funciones de la Delegación de la Autoridad las siguientes:

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Y en su apartado b) dice: " Ejercer la máxima autoridad en el callejón de la plaza, apoyado por sus auxiliares. A tal fin, con la colaboración activa de los alguacilillos y del personal empleado de la empresa, controlará la idoneidad de las instalaciones, el acceso y ocupación de los burladeros, previa expedición de los correspondientes pases de acceso al callejón de la plaza de toros, debiendo ordenar el abandono del mismo a aquellas personas que se encuentren consumiendo en éste bebidas alcohólicas, no contaran con la preceptiva autorización para su permanencia en aquél o no ocuparen sus lugares en el burladero del callejón que les correspondiese durante el desarrollo del espectáculo o sean ajenas al mismo".

¿Por qué la autoridad no aplica la norma, el reglamento? Tener un pase de callejón en tu poder no quiere decir que estés autorizado a permanecer en él si no tienes nada que ver con el espectáculo, porque la autoridad, en ese caso, lo dice el reglamento, debe invitarte a abandonar el callejón. Pero ¿por qué no se aplica la norma? Pues porque es la propia autoridad la que entrega los pases a los ayuntamientos, las empresas etc.... y estos hacen con los pases lo que ya vemos después, poblar los callejones, destinados a los profesionales que intervienen en el festejo, de amigos y compromisos que podrán contar lo bien que se ven los tros desde el callejón.

Y ya que hablamos de Feria, me llega que este año los cacharritos han sido un verdadero infierno para las carteras de los padres que han asomado por allí para dar un paseo a sus hijos. Y es que, por lo visto una vueltecita de nada, te puede salir por unos 6 o 7 euros. Supongo que el Ayuntamiento de Algeciras debe tener alguna posibilidad de negociación con los feriantes para normalizar los precios de las atracciones. ¿Cuántos niños se habrán quedado con las ganas de subirse al látigo Kini porque sus padres no se lo pueden permitir? En fin, a ver si, de verdad, hacemos de Algeciras una ciudad alegre y divertida porque pagamos muchos impuestos para tan pobres servicios.

Escuchaba esta mañana al alcalde José Ignacio Landaluce, comentar que ya estaban trabajando en la feria del próximo año. Pues aquí le dejamos ya tiene un par de deberes.