Sociedad

Como cada 16 de julio, la Virgen del Carmen procesiona por las calles de Jaén

Se trata de la advocación carmelita que aguarda todo el año en la Parroquia de San Juan y San Pedro, del barrio del mismo nombre ubicado en el casco antiguo de la capital jiennense

La Virgen del Carmen de Jaén, dispuesta en su trono para la salida procesional. / Cofradía Carmen Jaén

Jaén

Como cada 16 de julio, la Virgen del Carmen procesiona por las calles de Jaén. Se trata de la advocación carmelita que aguarda todo el año en la Parroquia de San Juan y San Pedro, del barrio del mismo nombre ubicado en el casco antiguo de la capital jiennense. Y es que, caiga el 16 de julio en el día de la semana que caiga, la Cofradía siempre realiza su salida procesional con la bella talla de la Virgen del Carmen para recorrer uno de los itinerarios más bellos de cuantos se hacen en el tiempo de Glorias.

A las nueve de la noche, cuando los rigores del calor que se esperan este martes se apacigüen, Nuestra Señora del Carmen aparecerá por las puertas del templo en la Plaza de San Juan, por la que parece que no han pasado los siglos, siendo uno de los lugares más idílicos con los que cuenta el casco antiguo de la ciudad de Jaén.

Pues bien, los y las jiennenses podrán disfrutar de la Virgen del Carmen a su paso por la referida Plaza de San Juan siguiendo por Almendros Aguilar (con especial énfasis a su paso por el bellísimo Arco de San Lorenzo), Madre de Dios, Maestra, Plaza de Santa María, Campanas, Plaza de San Francisco, La Parra, Cerón, Colón, Plaza de la Audiencia, Martínez Molina, San Juan, Plaza de San Juan y la entrada en su Templo.

La imagen de Nuestra Señora del Carmen de Jaén es obra del escultor José Navas-Parejo Pérez. Fue realizada en el año 1949, por encargo de Manuel Tercero Sánchez por entonces Gobernador de la Cofradía, a la cual donó la imagen. La imagen es de disposición independiente, en madera policromada al óleo y estofada, de 1.75 de altura. Por su parte, el trono en el que procesiona es un pro­yecto de Orfebrería Andaluza de Sevilla, bajo la direc­ción del maestro orfebre Manuel de los Ríos. Consta de una peana en metal de alpaca, repujada y plateada, a cuatro caras, con el escudo de la Hermandad en el fren­te de la misma y otros motivos en las restantes caras de 30 cms. de altura, 60 x 60 en la base y 80 x 80 en la parte inferior. Parihuela metálica con armazón metá­lico para la sujeción de la canastilla con dos maniguetas de aluminio de seis metros de largo, de 17 x 5 cms., forradas de terciopelo por la parte inferior y terminales de metal plateado.