Antonio, el "poli" anónimo que redujo al ladrón del cepillo de la Iglesia de la Magdalena (Sevilla)
El hecho se produjo ayer jueves frente al bar Donald de la calle Canalejas. La rapidez y la decisión de las personas que se percataron del robo fue suficiente para que el ladrón no se saliera con la suya
Antonio, el "poli" anónimo que redujo al ladrón del cepillo de la Iglesia de la Magdalena (Sevilla)
Sevilla
De todos es conocida la "afición" de algunos cacos por las Iglesias y su contenido, desde joyas, enseres e incluso cálices que desaparecen para ser vendidos por mucho menos que el valor religioso que para muchas personas tiene. Tampoco se salvan los "cepillos", la caja que en una iglesia sirve para recoger las limosnas. Este ha sido el caso que ayer se vivió en la Iglesia de la Magdalena, de Sevilla, cuando un hombre, ladrón muy conocido por la policía y que "atesora" muchas detenciones, le pegó un tirón a uno de estos cepillos y salió corriendo "como alma que lleva el diablo" y nunca mejor dicho...
Sin embargo, había "ángeles" alrededor de la iglesia que se percataron de lo sucedido. Con uno de ellos hemos hablado, se llama Antonio y ha sido el protagonista de este asunto en Hoy por Hoy Sevilla: "Yo iba en el coche con mi padre y mi madre y fue ella la que se dio cuenta de que había un hombre que perseguía a otro pero sin lograr alcanzarlo". "Le dije a mi padre que siguiera al ladrón y cuando ya lo teníamos a tiro, salí del coche y lo tiré al suelo, le hice un placaje y lo sujeté hasta que llegaron los vecinos".
Antonio no se lo pensó dos veces porque "la situación fue violenta, sobre todo para mis padres". "Cuando llegó la policía local, que tardó muy poco, se lo llevaron". "Son cosas que pasan". Gracias a Antonio la cosa no pasó a mayores, la iglesia recuperó su cepillo y los receptores de este dinero podrán beneficiarse de él.