¡Anastasiya Dmytriv se cuelga el oro en una final para la historia!

Un día que jamás olvidará, un viernes, 30 de agosto de 2024, que se coló en el corazón de esta campeona. Anastasiya Dmytriv, Tasy, se colgó el oro en los Juegos Paralímpicos de París 2024 después de una final espectacular.

Sencillamente estuvo sensacional en la serie final en la que la nadadora de origen ucraniano y criada en El Ejido fue la mejor de todas desde el inicio hasta el final de la prueba. Una campeona en todos los sentidos, que parecía un pez en el agua. Más que nadar, daba la sensación de que estaba volando por encima del agua, por encima de todas sus rivales. Ha hecho un tiempo de 1:19.75. La segunda fue Brock Whiston (1:21.04) y la tercera Viktoria Ishchiulova (1:24.50).

Anastasiya Dmytriv, Tasy, está muy agradecida a su entrenadora Patricia Prieto que siempre ha apostado por ella desde siempre. Además, el apoyo total de los padres de la campeona (Andrey y Natalia) ha sido otra de las claves para que Tasy haya hecho carrera en el mundo de la natación y haya conseguido el oro en sus primeros Juegos Paralímpicos en una carrera brillante en todos los sentidos. La trayectoria de Tasy es una maravilla. No tiene techo y sí un futuro enorme en la natación.

Pero el espectáculo de Anastasiya Dmytriv, Tasy, comenzó por la mañana en la serie de las semifinales en los Juegos Paralímpicos de París 2024. Brilló en la prueba de los 100 Metros Braza SB8 en la capital francesa quedando primera. Voló en la piscina clasificándose para la gran final que fue por tarde en un recinto deportivo lleno hasta la bandera con una afición entregad y una organización sobresaliente.

Los 100 Metros Braza es su modalidad perfecta y donde más rinde. A Anastasiya Dmytriv, Tasy se le vio muy segura y al mismo tiempo sólida en la serie de la semifinal, donde estuvo sobresaliente. Mandó en la prueba desde el primer segundo hasta el final, dejando claro que era una de las grandes favoritas para conseguir medalla en la cita olímpica de París.

La historia

Recordar que llegó a El Ejido con solo dos añitos con sus padres Andrey y Natalia, y a los cuatro años comenzó a practicar al mismo tiempo natación y gimnasia rítmica, pero finalmente apostó por la natación, su deporte preferido y su gran pasión.

Con tan solo 13 años se proclamó campeona absoluta del mundo en 100 Metros Braza SB8. Aquello no fue casualidad porque reeditó el oro en el Mundial de Mánchester. Una campeona en letras mayúsculas en la piscina, donde se mueve como pez en el agua. No es un topizaco. Es así, es la joven perla de la natación paralímpica española. Junto a los dos oros mundiales, tiene un bronce mundial en 200 estilos SM9 y oro y plata mundial en relevos 4x100 estilos mixto. Se ha convertido en poco tiempo en una coleccionista de medallas y con un futuro fantástico en la natación.

París se rindió ante la actuación de Anastasiya Dmytriv, Tasy, por la final que hizo en los 100 Metros Braza SB8.